La vitamina C, la cual está tan presente en los cítricos, es muy popular en época de gripes. Aunque no evitará que la contraigas, sí podrás acortar su duración además de la intensidad de los síntomas de este padecimiento tan común, siempre y cuando la hayas consumido antes. Además, es importante considerar que su consumo previene algunos tipos de cáncer y enfermedades cardiovasculares, entre otros beneficios para la salud.
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Posiblemente no estés consciente de toda la vitamina C que se encuentra en las hortalizas y frutas, las cuales son perfectas para el disfrute y nutrición de toda la familia. Lo mejor del caso es que no hay problema en excederse en su consumo, que de acuerdo a la Clínica Mayo es de 2,000 milígramos diarios, ya que el organismo se encarga de desechar lo sobrante. Mira todo lo que debes comer para aumentar los niveles de vitamina C y enséñaselo a tus hijos.
Los pimentones pueden darte más del requerimiento diario de vitamina C.
Además de ser deliciosos, los pimentones tienen un alto porcentaje de vitamina C, superando la dosis diaria recomendada. Con tan solo media taza de pimentones, del color que sea, estarás consumiendo el 106 por ciento de la cantidad sugerida por persona por día.
Incluye al brócoli entre tus alimentos indispensables.
El brócoli es un alimento rico en fibra, el cual también tiene un alto contenido de vitamina C. Media taza de esta verdura contiene 57 por ciento del valor diario recomendado, mientras que cruda equivale a un 43 por ciento. Como bien sabes, es un excelente acompañante para tus comidas.
Las coles de Bruselas son de gran aporte vitamínico.
En este listado de alimentos ricos en Vitamina C no pueden faltar las coles de Bruselas. Consume una porción de media taza para obtener el 53 por ciento del requerimiento diario. Hay variadas maneras de prepararlas y aprovechar su gustoso sabor, como verás en distintas recetas.
El repollo es otro alimento rico en vitamina C.
El repollo posee propiedades medicinales así como un gran valor nutricional. En cuanto a la vitamina C, media taza contiene el 31 por ciento del valor diario requerido para tener una buena salud. Degústalo cocido o crudo y bien lavado en vinagre, usándolo como parte de tus ensaladas, tacos y otras recetas hechas en casa.
El coliflor es un gran alimento por sus nutrientes.
Con tan solo media taza de coliflor crudo, obtendrás el 29 por ciento de vitamina C, fundamental para el óptimo funcionamiento del organismo cada día. Hay varias maneras de comerlo también cocido, gratinado o al horno, lo importante es conocer sus propiedades y comerlo con cierta frecuencia.
Los chiles son poderosos en su contenido de vitamina C.
Si eres de las que comes picante, estarás contenta de saber que su contenido en vitamina C es muy alto. Un solo pimiento o chile abarca el 121 por ciento de lo requerido diariamente, por lo que puedes hacerlo parte de tus comidas favoritas y volverte una chef con mucha sazón.
La toronja posee el 43 por ciento de vitamina C diaria recomendada.
Una de las frutas por excelencia para obtener vitamina C de forma natural es la llamada toronja o pomelo. La mitad de esta fruta proporciona el 43 por ciento de la cantidad necesaria para el día. Recuerda consumirla en jugos, ensaladas o en rodajas para el desayuno o la merienda.
La guayaba reina entre los alimentos potentes en su valor nutritivo.
La guayaba es milagrosa si se toma en cuenta su gran aporte de vitaminas, como la C. En una taza de guayaba cruda encontrarás el 413 por ciento de los valores diarios indicados, por lo que es un alimento privilegiado en todo sentido. Disfrútala de distintas maneras y combate enfermedades con esta maravilla natural.
La col rizada se recomienda por contener 89 por ciento de la dosis diaria.
La col rizada es otro alimento ideal para obtener vitamina C a través de la alimentación, por su aporte de 80 milígramos en una taza. Es mejor si la consumes cruda ya que conserva sus propiedades intactas. Sin embargo, si la prefieres cocida, combínala con otros vegetales para acompañar tus carnes o pescados.
El kiwi provee el 71 por ciento de la cantidad de vitamina C recomendada.
Media taza de esta fruta exótica tiene 70 milígramos de vitamina C. Puedes comerla cruda, lavándola bien y quitándole la cáscara, en una ensalada de frutas, en batidos o incluso como parte de tus postres, incluyendo tartaletas o pasteles.
Los limones son una fuente incomparable de vitamina C.
El limón es muy popular por sus propiedades medicinales, pues como debes saber, es una fuente importante de vitamina C. Te recordamos que un limón puede contener 44.5 mg de la misma, por lo que debes aprovechar su uso frecuente como aditivo a sopas, jugos, pescados o ensaladas. Incluso, puedes preparar una buena limonada caliente o fría, según tu gusto.
Las naranjas son grandes aliadas para la salud.
La naranja es otra de las consentidas a la hora de consumir vitamina C. Una de estas frutas de tamaño mediano proporciona 70 milígramos de la vitamina. Si eres de las personas que la prefiere en jugo natural, 3/4 de taza contiene el 103 por ciento de la dosis sugerida para cada día.
El mango es una fruta deliciosa y muy vitamínica.
Hablando de frutas que poseen vitamina C, nos topamos con el mango. Una taza del mismo crudo contiene 60.1 miligramos, por lo que su dulce sabor viene acompañado de grandes beneficios. Consúmelo solo, con otras frutas o en batido, sabiendo que estás apostando por tu salud.
La papaya aporta el 106.2 por ciento de la dosis diaria recomendada.
La papaya es una fruta que encanta a chicos y adultos por su rico sabor. Y lo mejor es que también contiene vitamina C en abundancia. Una papaya pequeña cuenta con aproximadamente 95.6 miligramos de dicha vitamina. Es delicioso comerla en trozos, con miel y limón o en un batido.
Los guisantes incluyen una cantidad considerable de esta vitamina.
En tu lista de compras incluye los guisantes, proveen el 9 por ciento del valor recomendado de vitamina C por día. Recuerda que combinándolo con otros alimentos que la incluyan, cumplirás tus objetivos, manteniendo una alimentación propicia para ti y tu familia. Busca recetas que incluyan guisantes como salsas para pastas, paella, ensalada de gallina o sopas caseras.
Las papas aportan un 19 por ciento de vitamina C.
En una papa de tamaño mediano encontrarás 17 milígramos de vitamina C, por lo que es un excelente alimento. Manteniendo la intención de comer saludable, opta por consumirlas hervidas, en puré, al vapor o al horno. Preferiblemente evita que las papas sean fritas.
Las espinacas son conocidas por ser muy alimenticias.
La vitamina C está presente en las fabulosas espinacas, en una proporción de nueve milígramos por media taza. Es bueno consumirlas en tortillas, en arroz o risotto, en salsa para pastas o pizzas. Busca una receta de crema o ensalada de espinacas y benefíciate de sus propiedades nutricionales.
Las fresas aportan 54 por ciento de la dosis de vitamina C recomendada.
Si eres amante de las fresas o frutillas, celebrarás que media taza de esta deliciosa fruta fresca aporta 49 milígramos de vitamina C. La puedes comer en postres, ensaladas de frutas, batidos, merengadas o helados. Solitas también son muy ricas y perfectas para una merienda saludable.
La batata aporta 65 por ciento de la cantidad recomendada.
La batata o camote es un alimento rico en vitamina C, por lo que una porción horneada contiene el 65 por ciento requerido por día. Otra manera de consumirla es como puré o sancochada, como acompañamiento para tus comidas principales. Incluso, en algunos países se come en dulce.
El tomate contiene vitamina C y es un gran antioxidante.
Un tomate de tamaño mediano contiene 17 milígramos de vitamina C de la dosis diaria recomendada. Siendo el rey de las salsas y las ensaladas, se utiliza con mucha frecuencia en la gastronomía. En general, suele ser un favorito de personas de todas las edades.
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