Al escuchar gritos en la cocina, bajé corriendo y mi hija Sofy me dijo muy alterada: "¡mamá, Diego no me deja comer en paz y no me deja tranquila, dile que se vaya de aquí, ya no lo soporto, haz algo!". Tus hijos pelean todo el tiempo, checa estos 10 consejos que a mí y a mis pacientes les han funcionado a la perfección.
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Imagen vía Corbis
Escúchalos a ambos
Dale su turno a cada uno para hablar y aunque sepas quien fue el responsable inicial del conflicto, de ninguna manera tomes partido por alguno. Cada uno dará su versión, escucha atentamente a ambos "antes" de poner una solución.
Enfócate en sus sentimientos
Pregunta a cada uno ¿cómo te sientes?, evita juzgar y refleja su emoción (te noto muy enojado, triste, angustiado, etc.). Si sienten tu empatía, sabrán que no hay favoritismo y evitarán llamar tu atención por medio de la rivalidad.
No seas réferi
No se trata de separarlos sino de regular su emoción, es muy probable que todos estén molestos al momento del conflicto así que después de reflejar la emoción, pregunta a ambos si están listos para proponer soluciones o lo hacen más tarde cuando todos estén en calma.
No permitas la violencia
Si en medio de la discusión llegan a las agresiones físicas, detenlos de inmediato y diles con tono firme que esa no es la forma de resolver un conflicto y mándalos a correr unos minutos a cada uno por separado. Es necesario que descarguen esa fuerza física en algo constructivo.
Retira el objeto del conflicto
Dirige tu atención al objeto o la situación por la que pelean: "en este momento, este juguete es un problema, así que nos llevaremos el problema a otro lado porque los está haciendo pelear, si el juguete los lleva a discutir, significa que no está bien tenerlo aquí".
Pide opciones de solución
Preguntales ¿qué piensan hacer para que esto no vuelva a suceder?. Dales la responsabilidad de plantear opciones, pregunta qué se les ocurre y que te den como mínimo 3 alternativas, Invítalos a pensar para que se comprometan en la solución.
Guíalos a negociar
Es común que sus propuestas sean solo a su favor y no a favor del bienestar de todos, así que propón estrategias de azar para que aprendan a negociar: "como ambos quieren este juguete, ¿porque no lanzan una moneda y dejan el turno a la suerte? o ¿Qué otra opción tienen en mente?".
Dejalos resolver el conflicto
Después de algunos días de llevar a cabo este procedimiento, intenta que tus intervenciones vayan desapareciendo y solo hazlas en caso necesario, y dales el recordatorio: "¿Recuerdan la moneda?", así sabrán que es una señal de que tienen que negociar.
Elogia sus cualidades de resolución
Cuando lo resuelvan por sí mismos, dirígete a ambos reconociendo la habilidad que tuvieron para resolverlo, por ejemplo: “A ti te felicito por ser tan paciente y ceder tu turno y a ti te felicito por proponer tan creativa idea”.
Reglas específicas de convivencia
Escriban en una pizarra las normas que proponen para que se puedan respetar y plantealo así :" tengo esta pequeña pizarra y ahora cada uno escribiremos una regla para convivir mejor en casa, mi regla es tocar la puerta antes de entrar a las habitaciones, ¿cuál quieren poner?".