
El pasado 4 de julio se registraron lluvias atípicas en el estado de Texas, las cuales provocaron inundaciones sin precedentes. La fuerza del agua incomunicó comunidades, causó destrozos y la muerte de al menos 88 personas, mientras que decenas están en calidad de desaparecidas.
Entre las víctimas fatales hay 27 personas, niñas e instructores, que al momento del desastre formaban parte de Camp Mystic, un popular campamento cristiano de verano que año con año se realiza a orillas del río Guadalupe, en el condado de Kerr.
La crecida del río provocada por las fuertes lluvias tomó desprevenidas a todas las integrantes del campamento. Sin embargo, dos jóvenes mexicanas ya compartieron en entrevista el acto heroico que llevaron a cabo, luego de que salvaran a 20 niñas de morir a causa de las devastadoras inundaciones.
Narraron cómo salvaron a las niñas de las inundaciones.
Silvana Garza Valdez y María Paula Zárate, dos jóvenes mexicanas, se convirtieron en unas auténticas heroínas para un grupo de 20 niñas, quienes estaban a su cuidado en un campamento de verano organizado en el estado de Texas.
Las dos jóvenes, quienes tienen tan solo 19 años, conversaron con NMás de México, donde compartieron su testimonio y todo lo que hicieron para mantener a salvo a 20 niñas asustadas por la falta de luz, por la tormenta y por todo lo que sucedía al exterior.
“Estábamos en las cabañas en la noche y estábamos nosotras con nuestras niñas porque estábamos trabajando y empezó a llover a la 1 de la mañana. Estaba fuertísima la lluvia y nadie podía dormir. Ahí estuvimos todo el día, toda la noche, en las cabañas esperando a que nos dieran más información”, inició contando María Paula.
Al mediodía se dieron cuenta del tamaño de la tragedia.
A pesar de que en su campamento todas sus niñas resultaron ilesas de la tormenta, Silvana detalló que alrededor del mediodía les informaron a ellas y al resto de las consejeras que el campamento Mystic resultó severamente afectado, siendo ahí donde se encontraban las niñas y las instructoras que fallecieron.
“El plan era meter a las niñas sobrevivientes del otro campamento a nuestras cabañas. Organizamos a todas las niñas para hacer carteles de bienvenida, para juntar ropa que quisieran donar porque, obviamente, perdieron todas sus cosas”, compartió Silvana. Sin embargo, esa acción ya no se llevó a cabo porque a las sobrevivientes de Guadalupe las evacuaron con ayuda de helicópteros.
Escribieron los nombres de las niñas en su piel.
María Paula relató que una de las tantas acciones que tomaron para salvaguardar a las niñas que estaban a su cuidado fue que les escribieron sus nombres en una parte visible de su cuerpo.
“Como pensamos que también nos iban a evacuar, empezamos a escribirnos nuestros nombres en la piel, donde se nos viera. A las niñas les empezamos a escribir sus nombres donde se pudiera, les pusimos sus gafetes, les dijimos que hicieran una maleta con sus cosas, con lo que más necesitaran, que se trajeran su animal favorito, para prepararlas para evacuar, pero, obviamente, no sabíamos si nos iban a evacuar o no”, continuó María Paula.
Buscaron tranquilizar a las niñas con diversas actividades.
A pesar de que ellas sabían lo que había pasado en el otro campamento, Silvana compartió todo lo que ella y María Paula hicieron para mantener tranquilas a las niñas a su cuidado, quienes se comenzaron a inquietar al ver la devastación que había al exterior de su cabaña.
“Empezamos a distraerlas con los carteles, nos pusimos a jugar juegos, a cantar canciones. Es una sensación horrible, fue algo muy feo”, narró Silvana, quien detalló que estuvieron incomunicadas de sus familiares por más de 20 horas.
Días antes, ellas durmieron en el campamento que desapareció.
A pesar de que están agradecidas de que ellas y sus niñas están a salvo, Silvana no pudo evitar quebrarse en llanto al recordar que tanto ella, como María, estuvieron durmiendo días antes en el campamento Mystic del río Guadalupe, el cual desapareció tras la tormenta.
“Fue algo terrible porque hace una semana nosotras estábamos durmiendo en esa sucursal del campamento. Simplemente fue increíble saber que nos movieron del campamento, por algo estábamos en el otro campamento y estamos vivas”, comentó la joven con la voz entrecortada.
Están muy orgullosas de lo que hicieron para salvar vidas.
En la recta final de la entrevista Silvana compartió lo importante que resultó para ellas esta prueba que les puso la vida, en donde antepusieron la vida de las niñas a su cuidado, sobre la de ellas.
“Es algo que nunca se nos va a olvidar. Es una experiencia traumática y estamos muy agradecidas que estamos vivas”, concluyeron.