Desde que el mundo es mundo he escuchado que la alcachofa es buena para adelgazar. Recuerdo a una doctora en mi Caracas natal, que aplicaba un tratamiento a sus pacientes con sobre peso que consistía en tomar unas medicinas homeopáticas que estaban hechas a base de alcachofa y raíz de valeriana, y también escuché de parches de alcachofa que se aplicaban en la piel con el mismo propósito y hasta de inyecciones. La verdad es no soy muy amiga de esas cosas, entre otras cosas porque soy muy miedosa, pero si me dicen que tomándome un agua de alcachofa natural, puedo perder unas cuantas libras, entonces creo que sí me animaría a probarla.
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Entre los múltiples beneficios de las alcachofas, se incluyen que son bajas en contenido calórico, pero aportan nutrientes incluyendo vitamina B, hierro, potasio, calcio y magnesio, y como son ricas en flavonoides (antioxidantes) contribuyen a la regeneración de los tejidos y a combatir el cáncer y las enfermedades cardíacas.
Pero y si queremos adelgazar ¿cómo y cuánta agua de alcachofa hay que consumir? Y ¿dónde se compra o se prepara esta agua a la que muchos atribuyen propiedades milagrosas? Precisamente de eso se trata este post.
La alcachofa en general, y el agua de alcachofa en particular son muy buscadas porque ayudan a la digestión, a la función hepática y lo más esperado: ¡a eliminar grasa del organismo! Además, es un diurético natural que tiene funciones depurativas y desintoxicantes.
Para preparar el agua de alcachofas, sólo tienes que comprar alcachofas frescas y mejor si son orgánicas. Después de lavarlas muy bien, debes cortar la parte de abajo del tallo, cortar la alcachofa en dos mitades y ponerlas en una olla con abundante agua que las cubra. Esta olla la llevas a hervor a fuego medio-alto y la cocinas medio tapada por unos 15 minutos. Cuando el agua se torne marrón, está lista. Sólo tienes que dejar enfriar y colar en una jarra. Desecha los sólidos y ponla a refrigerar.
Esta agua de alcachofas se puede tomar fría, con un poco de hielo o caliente. En teoría no deberías agregarle nada, pero si sientes necesidad de endulzarla, usa miel natural. Debes mantener la jarra tapada en la nevera. Puedes tomar tantos vasos al día como desees y tener en cuenta que deberías consumirla durante los días siguientes al de la preparación.
Quienes toman agua de alcachofa reportan sufrir de flatulencias. No puedo hablar con propiedad porque nunca le he tomado. Pero ya sabes: guerra avisada no mata soldado.
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