Purifícate y desinflámate con este milagroso licuado de frutas

Menos mal que entre Acción de Gracias y Navidad tenemos por lo menos tres semanitas para purificarnos y desinflamarnos. Yo empecé el mismo sábado después del "viernes negro" con mis licuados y jugos verdes, y toda esta semana, después de mi cafecito, sólo estoy desayunando licuados de vegetales y frutas, y comiendo lo mínimo necesario para poder disfrutar de mis fiestas en paz, sin estarme preocupando de cuánto peso o de cuantas calorías tiene esto o aquello. 

Salvo por estos jugos y batidos que están empacados de nutrientes, no como nada hasta la hora del almuerzo, cuando me tomo un caldo casero de vegetales, para entrar en calor, disfruto de otro licuado y me como un buen tazón de ensalada verde con atún o un pedazo de queso. Mira más abajo para que veas que delicia el licuado purificador y desinflamante de la foto.

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Este licuado sólo tiene tres ingredientes: papaya bien madura, jugo de naranja y chía. No le puse ningún edulcorante porque la papaya estaba bien madura. Tampoco le puse hielo porque el cuerpo no me pide nada frío con este clima.

Como sabemos, la papaya tiene propiedades desinflamantes y además es rica en antioxidantes y también en vitamina C. La naranja también tiene vitamina C, tan necesaria para fortalecer el sistema inmunológicos y prevenir enfermedades como la gripe. Además su rico contenido en ácido cítrico la hace ideal para desinfectar y purificar.

De la chía solo puedo decir que es rica en calcio, omega 3 y en fibra soluble e insoluble porque contribuye enormemente a mejorar la función intestinal y nos ayuda a lograr el vientre plano que todas deseamos.

Licuado purificador y desinflamante de frutas con chía
Rinde para 2 vasos

Ingredientes
2 tazas de papaya pelada, sin semillas y cortada en trozos
1 taza de jugo de naranja fresco
1 cucharada de chía

Preparación
1. Pon todos los ingredientes en el vaso de una licuadora.
2. Licúa hasta que el licuado tenga una consistencia suave y cremosa.
3. Disfruta.

Más de mis recetas en mi blog de cocina.

Imagen vía Enriqueta Lemoine