Aunque la maternidad debe ser celebrada y reconocida todos los días, el Día de las Madres es una fecha especial en la que, por lo general, nuestra pareja e hijos nos celebran con regalos, llevándonos a comer o preparando un desayuno especial. Sin embargo, no todas tenemos la dicha de tener un marido o hijos detallistas o, tal vez, no tenemos pareja y los hijos aún están pequeños. Cualquiera que sea el caso, nosotras también podemos aprovechar ese día especial para consentirnos y celebrarnos.
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Hay varias formas en las que puedes consentirte o regalitos que tú misma te puedes dar, como tomar una clase de maquillaje y lograr maquillarte como toda una profesional, realizar una parrillada en casa con tus amigas, irte de picnic, aprender a meditar, tomar una clase de yoga o hacer senderismo y conectar con la naturaleza. También te puedes dar unos caprichitos, como comprarte eso que hace tanto tiempo deseas, irte de viaje con tus amigas o ,simplemente, reunirte con tus amigas que también son mamás y disfrutar el día.
Toma una clase de maquillaje.
Si eres una mamita que colecciona labiales, rubores y máscaras de pestañas, entiendes lo importante que es para ti maquillarte como toda una profesional. Una excelente idea de inversión para este Día de la Madre es tomar una clase personalizada de maquillaje para aprender a elegir el color de la base correcta según tu tipo de piel, las sombras, el rímel y, por supuesto, los mejores lipsticks. Conforme avanzas en edad, es recomendable utilizar colores nude, capaces de restarte años.
Prueba con una asesoría de renovación de imagen.
Regalarte ropa es un clásico y nunca falla, pero hacerlo de forma personalizada es un plus. Un asesor de imagen podrá decirte cuáles son los colores que debes elegir al vestir y las prendas que se adaptan mejor a la forma de tu cuerpo. En este propósito por renovar tu forma de vestir tienes la opción de regalarte una asesoría o bien un conjunto completo, todo dependerá de tu presupuesto.
Haz una parrillada en tu honor con tu comida preferida.
No esperes a que alguien te organice una comida. Tú saca la parrilla y prepara las carnes, las verduras y las bebidas que más te gusten. Te garantizamos que alrededor de este encuentro no faltarán las risas, pues es un regalo distinto que compartes con los que más te aman y, por supuesto, acepta toda la ayuda que te ofrezcan, ese día la consentida y la reina tienes que ser tú.
Organiza un día de picnic con tus amigas.
Compartir con tus amigas es una de las necesidades que todas las mamás tenemos, por lo que te invitamos a armar un picnic con ellas. Te garantizamos que será uno de los días más felices. Aprovecha la llegada de la primavera y el verano para salir a disfrutar de la naturaleza, el aire fresco y el buen clima. ¡Date este regalo que tanto mereces!
Disfruta de una tarde o noche de aperitivos y vino.
Una tarde de aperitivos y vino es ideal para celebrarte, ya sea sola o que llames a tus amigas para pasar un día distinto. Preparar una tabla con jamones y quesos no es para nada difícil. Para que lo logres te recomendamos ver este video, toma nota, colócate los tennis y vete al supermercado.
Regálate un tatuaje en honor a la maternidad.
Los expertos en este arte afirman que existen siete razones por las que deberías hacerte un tatuaje. Estas son: Para expresar parte de tu personalidad y unión por siempre, por un homenaje, estética, símbolo de protección o amuleto. También se relacionan a superar momentos dolorosos y hasta para celebrar.
Regálate un buen masaje.
Ya sea porque estás amamantando a tu bebé, por cargar a tus hijos o simplemente por el estrés de ser madre, todas requerimos de un buen masaje de una hora al menos, así que regálate uno y disfrútalo inmensamente.
Vete de viaje solo con tus amigas.
Planea con anticipación un viaje con tus mejores amigas. Puede ser una escapadita de fin de semana o unas vacaciones más largas. Lo importante es que te vayas solo tú con ellas y los niños se queden en casa. Es un momento para desconectar y para ti.
Toma clases de yoga o certifícate como instructora.
Si comprendiéramos los beneficios del yoga en nuestra vida estaríamos practicándolo a todas horas. Desde el embarazo, hasta en la vejez, esta disciplina nos ayuda muchísimo. Te puede aliviar en momentos en los que estés atravesando por muchísima tensión, ansiedad o depresión y es que la maternidad tiene momentos hermosos, pero también trae muchos desafíos. Si la idea te gusta hasta puedes certificarte y ese será un regalo que te hagas para toda la vida.
Regálate el tiempo para comenzar a meditar.
La meditación tiene muchísimos beneficios para nuestra salud física y emocional. Nunca es tarde para comenzar. En la red puedes encontrar muchas opciones que van de acuerdo a lo que necesitas en ese momento. Esta meditación, en específico, es una de mis favoritas.
Quédate en pijama y en casa sin hacer nada.
Este regalo es de los menos costosos. Quédate en casa todo el día sola y sin hacer nada. Asegúrate de que alguien se haga cargo de tus niños toda la jornada para que puedas dedicarte tiempo a ti ut a descansar. No te pongas a limpiar, ni nada de eso, es más, pide tu comida favorita a casa. Consiéntete como hace mucho no lo hacías.
Prueba las flores de Bach como terapia.
¿Alguna vez escuchaste hablar de las flores de Bach? Se trata de una serie de esencias naturales muy concentradas que se utilizan para tratar los miedos, el estrés y la ansiedad, por solo mencionar algunas condiciones. Los flores de Bach forman parte de las terapias alternativas y sirven para tratar enfermedades físicas y psicológicas. Este kit me encanta porque es muy completo, así las puedes tener a la mano, según la situación por las que estés pasando.
Realízate un tratamiento estético totalmente distinto.
Saca una cita en tu salón de belleza para realizarte un tratamiento que te apetezca mucho y que nunca te hayas hecho. No se trata de que te vayas a pintar o a cortar el pelo, como siempre lo haces. Regálate algo distinto.
Haz un maratón de tus películas o series favoritas.
¿Cuántas veces tienes que ceder a los gustos de tus hijos o tu esposo? Dedícate a ver esa serie o telenovela de la que tanto te han hablado, sin que nadie te moleste y explícales que ese será el regalo que elegiste darte por el Día de las Madres.
Sal a bailar con tus amigas.
Si hay algo que extraño mucho es salir de fiesta con mis amigas y es que desde que soy madre es una actividad que casi nunca realizo —salvo que tomemos en cuenta las clases de Zumba-. Así que organiza un plan entre amigas y váyanse de fiesta. Nada como celebrar el Día de las Madres moviendo el esqueleto.
Date un baño de espuma por horas.
Cuando eres mamá, y más si tienes niños pequeños, es casi imposible darse un baño relajante de espuma. Asegúrate de que tienes quien cuide a los niños y prepárate un baño con tu aroma favorito, velitas, aceites, un bueno libro o tu música favorita y en compañía de una buena copa de vino.
Vete a cenar con las mujeres de tu vida.
Realiza una reservación en tu restaurante favorito y llévate a cenar a tu mamá, hermanas, tías y aquellas mujeres que signifiquen mucho en tu vida. El chiste es que no haya esposos, ni hijos, y que a nadie le toque cocinar, ni mucho menos limpiar.
Date un tiempo para tu pasatiempo favorito.
¿Hace cuánto que no realizas esa actividad que tanto te gustaba por falta de tiempo? A lo mejor te encantaba pintar, esculpir o practicar un deporte. Hoy es el día para volver a hacerlo y, con un poco de suerte, quizá logres hacerlo de manera constante.
Sal a callejear por tu ciudad sin rumbo fijo.
A veces lo que necesitamos es no tener un plan que nos estrese. Regálate salir por tu ciudad a caminar, como si fueras una turista. En el camino puedes descubrir un restaurante delicioso o tomarte un helado. Es una experiencia distinta que seguramente disfrutarás, pues a veces requerimos estar un tiempo solo con nosotras.
Realiza senderismo o vete a pasear en bicicleta.
A veces lo que las mamás necesitamos es justamente ponernos en actividad y estar en contacto con la naturaleza. En ocasiones pasamos demasiado tiempo entre pañales, limpiando la casa y cocinando. Un respiro de estas actividades nos vienen más que bien.
Cómprate un regalo que lleves tiempo queriendo.
Yo soy mexicana y en mi país es muy común que a las madres en su día se les regale una licuadora, una plancha o algo relacionado a las tareas domésticas. Yo no estoy muy de acuerdo con esta idea. Creo que debemos recibir lo que de verdad queramos, así que cómprate ese libro, bolso o perfume que tanto deseas.