Después de asistir a muchas personas en su lecho de muerte, cierto pastor sacó la cuenta: absolutamente nadie se lamentaba en ese momento de no haber limpiado la casa con más empeño y tampoco de no haber trabajado más horas. En cambio, la mayoría se arrepentía de haber omitido algunas de las acciones que aquí enumeramos.
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1. No viajar cuando tuviste la oportunidad.
2. No aprender otro idioma. No es tan difícil como crees.
3. Quedarse en una mala relación. Nadie que alguna vez sale de una mala relación mira hacia atrás sin reprocharse por no haberlo hecho antes. Si no eres feliz con tu pareja y la pasan peleando o sientes que mereces más, entonces cierra círculos.
4. No usar protector solar. Las arrugas, lunares y el cáncer de piel en gran medida se pueden evitar si te proteges adecuadamente cuando aún eres joven.
5. Perder la oportunidad de ver a tus músicos favoritos. Esperaste AÑOS por ese concierto de tu artista o grupo adorado; y no fuiste porque "querías ahorrar", porque no tenías con quién ir o porque simplemente se te pasó.
Un concierto es, sobre todo, un buen recuerdo que te acompañará siempre.
6. Tener miedo de hacer cosas. Sí, seguro cambiar de trabajo, asusta; lo mismo que iniciar una relación nueva o emprender ese proyecto soñado. Pero, ¿qué es lo peor que te puede pasar? Que el miedo no te detengan nunca, al final cuando mires atrás te vas a arrepentir más de lo que no hiciste que de lo que te animaste hacer.
7. No hacer del ejercicio una prioridad. No te decimos que te conviertas en una mujer atlética amante del gimnasio, pero salir a caminar o correr alguna vez no va a matarte. Cuando tengas 30, 40, 50 o 60 tu salud se verá afectada por lo que no hiciste de joven.
8. Dejarte definir por los roles de género. Pocas cosas son tan tristes como
dejar de hacer algo anhelado "porque eso no es para mujeres".
9. No renunciar a un trabajo malo. Claro que hay muchas cuentas por pagar y que el dinero es importante, pero si por eso tienes que aguantar a un jefe grosero o hacer cosas que odias, no vale la pena.
Ten coraje para renunciar a aquello que no te hace bien y ten un plan para mejorar la situación.
10. No esforzarte más en la escuela. O no regresar a ella por pensar que estás demasiado vieja para entrar en un aula. La gran verdad es que jamás se está tan mayor que no se pueda aprender algo que podría cambiarnos la vida.
11. No darte cuenta de lo hermosa que eres.
12. Tener miedo de decir "Te amo".
13. No escuchar los consejos de tus padres. O escuchar demasiado los tontos consejos de la gente que siempre ha estado allí para frenarte (y no para estimularte).
14. Pasarte la juventud centrado en ti. Te vas a avergonzar de esto, no seas egoísta, piensa también en los demás. Todos tenemos problemas, pero en vez de pasarte lamentándote lo "horrible" que es tu vida ¿qué tal si empiezas por ayudar a otros?
15. Dar demasiada importancia a lo que piensan los demás.
16. Seguir los sueños de los otros antes que los propios. Está bien apoyar a tus amigos, familia o pareja a que logren sus metas, pero que esto no te detenga a ti, tu también debes ir por sus propios sueños y cumplirlos. Tú eres la prioridad.
17. No salir adelante con la suficiente rapidez. La gente mayor recuerda los largos períodos que dedicaron a recoger sus propios pedazos del piso y saben que fue una pérdida de tiempo haberle dedicado tanto dolor a algo que no valía la pena.
18. Guardar rencores, especialmente con aquellos que amas. Lo mejor que puedes hacer es perdonar para sentirte libre de nuevo.
19. No haberse sometido a una terapia psicológica que nos ayude a poner las cosas en su lugar.
20. No hacer suficiente voluntariado. Llegar al final de tu vida sin haber contribuido a hacer del mundo un lugar mejor es una gran fuente de tristeza para muchos.
21. Descuidar tus dientes. Cepíllate. Usa hilo dental. Acude a los chequeos regulares.
22. Perderte la oportunidad de hacerles preguntas a tus abuelos antes de que mueran. Ellos son las personas más interesantes del mundo, han visto muchas cosas, te han visto nacer y también a tus padres. Tienen las aventuras más increíbles del universo y están ahí para ti, son un libro abierto para que acudas a ellos cuando los necesites.
23. Trabajar demasiado.
24. No aprender a cocinar una comida increíble.
25. No detenerte lo suficiente para apreciar el momento. En el mundo actual muchas veces vamos acelerados y no nos detenemos a ver las flores, el cielo, la luna o escuchar la risa de las personas que más queremos.
26. No poder terminar lo que empezaste. Si tienes un sueño o meta lucha por él. A veces lo empiezas, inicias un proyecto pero a la mitad lo dejas inconcluso. Con el tiempo te das cuenta que debiste terminarlo.
27. No jugar con tus hijos lo suficiente. Esta es una de las tonterías por las que más bofetones queremos darnos.
28. Nunca tomar un gran riesgo. Saber que diste un salto de fe al menos una vez incluso si te caíste de bruces será un gran consuelo cuando seas viejo.
29. No tomarte el tiempo para desarrollar tu red de contactos. Esto puede parecer un montón de basura cuando eres joven, pero más tarde se convierte claramente en una de las principales maneras de conseguir muchos trabajos.
30. Preocuparte demasiado. Como cantaba Tom Petty, "La mayoría de las cosas que me preocupan nunca suceden de todos modos".
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