Soy una fiel defensora de la lactancia materna y creo firmemente que cualquier mujer puede amamantar siempre que se informe y cuente con el apoyo de una experta. He observado que son muchas las mujeres que fracasan en su intento de dar de mamar a sus bebés y aunque quieren hacerlo no lo consiguen. La presión social puede ser muy fuerte y por ello hay ciertas cosas que no debemos decir nunca a una madre que quiera dar el pecho o se encuentre estableciendo la lactancia.
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Lo más importante es escuchar a los especialistas, la psicóloga Pamela Sosa, quien es consultora internacional certificada en lactancia nos ha explicado cuáles son esas frases que debemos evitar decir porque hacen que las posibilidades de tener éxito al dar la teta disminuyan y además no son ciertas.
Nunca le digas a una mujer que amamanta las siguientes frases.
"¿Será que sí tienes leche? ¿Será que se está llenando? Veo a tu bebé muy flaquito", son frases que ponen en modo pánico a las madres que están comenzando la lactancia y pueden ser un factor determinante para que el amamantar fracase.
Solo el 2% de las mujeres pueden tener un problema fisiológico para producir leche.
"El cuerpo humano y la naturaleza son tan increíbles que incluso mamás que no han llevado un proceso de embarazo pueden lactar. Entonces yo les digo imagínense a las mamás que nos embarazamos, que ya mi cuerpo está listo para producir leche de pronto escuchar el 'no tengo leche'. No, no tenemos información pero la leche ahí está. No tenemos el apoyo que necesitas, pero leche sí tienes", expresó Pamela Sosa en A que no te atreves.
No digas que "tu leche no es de buena calidad".
"No existe leche de buena o de mala calidad. Cada leche de cada mamá es especial para su bebé. Incluso hay estudios de mamás en África, en desnutrición, que producen leche de excelente calidad. No existe la buena leche y la mala leche. Es la leche que tu bebé en particular necesita", comentó la consultora en lactancia, rompiendo así con ese mito de que puede que le estemos dando "leche mala" al bebé.
Jamás compares la lactancia de una mamá con la de otra.
Cada experiencia al amamantar es distinta, por ello no debes comparar el proceso de una mamá al lactar con el de otra. De la misma manera no es correcto comparar el crecimiento de un bebé que toma leche materna con otro que toma leche de fórmula.
Una mamá no quiere escuchar que le digas "¿por qué no le complementas?".
"No se está llenando. ¿Será que tienes leche? ¿Por qué no le complementas con fórmula" son frases que debemos de evitar decirle a una madre que amamanta, recomienda Pamela al explicar que además, esta información es totalmente erronea y solo estresa a las mamás que están haciendo su mejor esfuerzo para lactar a sus bebés.
La información es la clave para una lactancia exitosa.
Para que una madre pueda establecer una lactancia exitosa con su bebé solo requiere informarse. Mientras más informada esté mucho mejor. Hay que comenzar desde el embarazo para así saber a qué es a lo que nos enfrentaremos. Debemos prepararnos física y emocionalmente al igual que confiar en los consejos de las consultoras de lactancia sin dejar que nos metan miedo con creencias falsas.
Mientras más sepamos de lactancia mejor.
Si deseas profundizar más sobre las cosas que como sociedad hacemos mal en torno a la lactancia puedes escuchar este podcast. Se discuten aspectos que van desde preguntarle a una mamá cómo va poder amamantar si tiene senos pequeños hasta recomendarle que le de fórmula a su bebé para que duerma mejor sin siquiera conocer el caso en particular.
"Sí puedes, sí puedes", es lo que debemos decir a las mamás que desean lactar.
En vez de desanimar a una mamá que desea dar el pecho a sus bebé –sabiendo que es la mejor opción para el pequeñito y también para ella– te recomiendo que te informes y que la apoyes, que le digas que sí se puede. La lactancia tiene muchos retos y desafíos. Eso hay que dejarlo claro. Lo importante es informarse, ponerse en manos expertas y dejar de repetir esas frases que solo asustan y que además no tienen sustento.
