Sin duda, este el mejor video que verás quizás en todo el 2019. Una mujer embarazada iba camino al hospital en Brooklyn, Nueva York, a las 5 de la mañana, cuando de repente se dio cuenta que su bebita no esperaría y nacería en ese mismo momento. Mientras que la pareja de la mujer se quedó petrificado por lo que estaba ocurriendo, el taxista tomó el control y se convirtió en coach de la mujer durante el parto (y en nuestra persona favortia), y manejó –nunca antes mejor dicho– la situación como todo un profesional.
Más en MamásLatinas: Las famosas embarazadas en 2019
Con una calma admirable, el taxista Luis J. Leonardo, de 33 años, le dio todas las instrucciones pertinentes a la mujer para que esta diera a luz, se mantuviera tranquila y arropara a su bebé nada más nacer. El taxista, lejos de molestarse o de ponerse nervisoso, se convirtió en el coach inesperado de la embarazada, justo cuando esta más lo necesitaba. Personans así nos alegran el día y son las que hacen la diferencia en el mundo; y que esta historia haya tenido un final feliz es maravilloso.
No se puede manejar una situación tan complicada de mejor manera.
Cuando una mujer embarazada y su pareja se montaron en su coche, este taxista ni sospechaba que minutos después tendría que ayudar a guiar a la mujer en su parto, y mucho menos que de la noche a la mañana se convertiría en una estrella viral en internet. Pero lo cierto es que el joven conductor de 33 años dio muestras de su tremenda personalidad y sus nervios de acero ayudando a la mujer, quien no ha sido identificada, durante probablemente el momento más complicado de su vida.
"Tienes que seguir respirando", le decía.
En varios momentos de este hermoso video, Luis me recuerda a una profesora de primaria, de esas que se las saben todas y que siempre están en control de la situación. No importa la historia que cuentes o la excusa que pongas, ellas siempre la habían escuchado antes y nada le sorprendía.
Cuando más desesperada estaba la pobre mujer en el asiento de atrás del taxi, Luis le recordaba: "Sigue respirando, cariño". Y cuando la mujer le dice: "¡Mi hija está naciendo. Tengo su cabeza en mi mano!", el taxista no pierde la compostura, y vuelve y le recuerda: "…pero tienes que seguir respirando".
Totalmente genial.
La cosa se pone seria, pero Luis guarda completamente la compostura.
El video muestra el momento en que la bebita llega al mundo, entre los gritos de dolor de su mamá y los de sorpresa se su papá. Luis, mientras tanto, guía a la mujer y le sigue dando instrucciones. "Lo peor ya pasó. ¡Lo has hecho! Ahora gira las piernas para el otro lado, agarra una mantita y tapa a la bebita", le dice el taxista con un voz completamente calmada. Segundos después, ni él se puede creer lo que ha ocurrido. "¡Ha sido un parto natural en el coche!", dice entre carcajadas.
Luis da todas las instrucciones hasta el final.
Ni se enfada porque le han manchado el coche, ni se le cae una gota de sudor de la frente. Este hombre debería ser premiado por saber mantener la compostura de esta manera. Hasta el final, el taxista explica exactamente lo que deben hacer: "Limpia un poco a tu bebé, llama al médico y dile que estamos a punto de llegar al hospital".
Luis no paraba de reír, estaba feliz y emocionado. Por su parte, la madre, en shock, sólo lograba decir: "He dado a luz en un auto…"
¡Sonrían, han sido grabados!
Al final, el dicharachero taxista les recuerda que él tiene todo grabado en video, pues sin haberse percatado, la cámara de seguridad de su taxi había dado fe de toda esta rocambolesca situación. Entre risas, Luis le dice a la nueva mamá que si quiere el video, él se lo vendía… como broma, claro está.
Para finiquitar la jugada, el conductor no encuentra mejor manera de celebrar que todo había salido bien que con una expresión que de seguro pronto se pondrá de moda: "We're Gucci".
¿Existe una manera más maravillosa que esa para expresar que todo ha salido a la perfección? Yo lo dudo mucho, sinceramente.