¿Qué tienen que ver los videojuegos violentos con la masacre de Sandy Hook?

Sé que hay mucha gente que piensa que los juegos de vídeo, la música, y las películas violentas no tienen tanta influencia sobre nuestros hijos, pero yo estoy en total desacuerdo. Digo, no es que una persona que no es violenta se va a volver violenta sólo porque juega vídeos violentos o escucha música que habla acerca de matanzas, pandillas, y pistolas. Pero me parece totalmente ridículo pensar que éste tipo de entretenimiento violento no nos esté afectando, especialmente a aquellos que ya tienen tendencias violentas. Lo más alarmante para mí es que pareciera que la violencia ya no nos impacta de la misma manera de antes. Es decir, nos hemos convertido en una sociedad desensibilizada.

Es que es imposible ver tanta violencia –por más que sea ficticia– y no perder un poco de sensibilidad. Y aunque nadie está diciendo que hay un vínculo directo entre la masacre de Sandy Hook y el hecho de que el asesino se pasaba horas jugando uno de los videojuegos más violentos que existe, estoy segura que no le debe haber hecho mucho bien.

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Por eso es que me parece una tremenda idea la de una comunidad en Connecticut que está organizando un evento en el que le están pidiendo a la gente que entreguen sus juegos de vídeo violentos. La idea está basada en el programa de compra de armas por medio del cual la gente puede vender sus pistolas sin que se les haga pregunta alguna. En este caso, la gente podrá intercambiar sus videojuegos violentos por una tarjeta de regalo para un restaurant local o para ir a jugar bolos. 

Los organizadores piensan que es una gran oportunidad que los padres hablen con sus hijos acerca de los videojuegos violentos y una opción para pasar tiempo en familia. El evento se llevará acabo el próximo sábado 12 de enero y los organizadores dicen que si consiguen que tan solo una familia intercambie su videojuego violento, habrán tenido éxito.

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