Llega la primavera y nunca sabes si esos moquitos, esos estornudos y ese malestar de nuestros hijos es por una alergia primaveral o un simple resfriado. ¿Cómo diferenciar una cosa de la otra? He hablado con una alergóloga para saber distinguir los síntomas y tratarlos correctamente.
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Por lo general, es muy fácil confundir el uno por el otro, pero estos tips deberían ayudarte a diferenciarlos y así saber qué es exactamente lo que debes hacer para ayudar a aliviar sus síntomas.
Así que presta atención y ¡buena suerte!
Muchos síntomas comunes
Una alergia y un resfriado tienen muchos síntomas comunes: moquitos, dolor de cabeza, nariz irritada, ojos rojos y estornudos. Para distinguirlos, he hablado con la doctora de Miami Vivian Hernández, miembro del concejo C.L.E.A.R. de Claritin, que recomienda la página web Smart Allergy Mom para consultar nuestras dudas sobre la alergia. Estas son las conclusiones.
Moquitos líquidos y transparentes
"Cuando uno tiene alergia la secreción nasal suele ser poco espesa. Con el resfriado a veces puede tener color y mayor densidad", explica la doctora. Es decir, que si la nariz "gotea" un liquido prácticamente transparente es más probable que estemos hablando de una reacción alérgica. Si hay que sonar para extraer la mucosidad será catarro. Si se suena simplemente para aliviar el picor, es más probable que sea alergia.
Estornudos repetidos
Según Vivian Hernández, "cuando se tiene alergia, el paciente tiene estornudos rápidos y múltiples". Los del resfriado serán más lentos y quizá acompañados de mucosidad. ¿Cuántas veces seguidas han estornudado tus hijos esta primavera?
Si hay fiebre, no hay duda
Las alergias no producen fiebre, por lo que si la temperatura está subiendo significa que algo más está pasando: un catarro quizás, o incluso algo peor. Lo mismo se puede aplicar al dolor de huesos y a la falta de energía. Los medicamentos de Claritin, por ejemplo, han eliminado el cansancio de la lista de posibles efectos secundarios.
La alergia no avisa y no se despide
Si bien los resfriados se incuban y se van combatiendo en un ciclo gradual, la alergia llega sin avisar y se va sin despedirse. Es una reacción a un alérgeno y el cuerpo responde solo cuando se le expone a él.
Las alergias no son viajeras
Por la misma razón, las alergias desaparecen si uno se va de viaje o se muda a un lugar en el que no existen los mismos alérgenos (como gramas o arizónicas). Un viaje a la playa si se está en la montaña o al revés puede interrumpir los síntomas, al contrario que el resfriado, que nos seguirá allá donde vayamos.
Los bebés NUNCA tienen alergia estacional
Según la doctora Hernández, los seres humanos "necesitan haberse expuesto al alérgeno al menos dos o tres estaciones" para desarrollar síntomas. Es decir, un bebé de menos de dos años no puede tener una reacción alérgica estacional, aunque sí de otro tipo. Así que si tu pequeño no ha superado esa edad y tiene síntomas al llegar la primavera, solo puede ser un resfriado. Lo mismo sucede al mudarse de una ciudad a otra con distinto clima. Los primeros años, la vida nos dará un descanso alérgico, pero no podemos cantar victoria. Con el tiempo se pueden desarrollar nuevas alergias.
En algo sí se parecen
En este caso hagamos un juego de semejanzas: si uno no tiene síntomas de resfriado no va al médico, ¿verdad? Pues la doctora Hernández asegura que en el caso de las alergias es igual. No tiene sentido ir a hacerse las pruebas si no se han registrado molestias, picores o estornudos. ¡No hay que adelantarse!
Las alergias son genéticas, los resfriados no
En las alergias hay un componente genético que encierra muchos misterios y que hace de la alergología una ciencia en continua evolución. La doctora Hernández asegura, por ejemplo, que los hispanos tenemos algo peculiar. "El asma es algo que nos afecta que a cualquier otro grupo étnico. Es más prevalente en los latinos y no se sabe por qué". Aunque el asma no es una alergia en sí, sí está relacionado con ellas y hay que tenerlo en cuenta.
Además, si ambos padres tienen alergias, la probabilidad de que el niño la "herede" es de un 66 %. Si solo la madre o el padre tienen alergias, entonces el porcentaje desciende a un 50 %.