Por un lado me siento afortunada por no sufrir grandes males durante este embarazo, pero por otro trabajo y me cuido para que así sea de manera muy consciente. Es por eso que encontré en la yoga prenatal una gran aliada para tener una gestación lo más sana y lo menos incómoda posible y este fin de semana descubrí una técnica que te va a fascinar.
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Una de las experiencias más hermosas que viví en mi camino estos meses de una maternidad consciente y plena fue la "técnica del rebozo". Silvia Lyle, mi maestra de yoga prenatal y doula, me introdujo a esta experiencia. Les comparto de qué se trata.
Como me relató Silvia, el "rebozo" ha sido utilizado en México por las parteras tradicionales desde tiempos ancestrales para reconfortar a la mamá que está embarazada. Mediante una técnica conocida con el nombre de "manteada", se realiza una serie de movimientos con el fin de relajar a la mujer para que se sienta más cómoda y confiada.
Candela Ferro
Se utiliza normalmente antes de que ocurra el parto, pero también se puede recurrir a ella durante el trabajo de parto mismo. La técnica de toque suave con el rebozo, en combinación con aromaterapia, masaje, movimiento fomenta la relajación y la comodidad de la futura mamá.
El rebozo me fascinó porque tengo mucho amor y respeto por la cultura ancestral de las mujeres de México. Silvia es mexicana, es parte de esa historia, de su gente. ¡Gracias Silvia!
