Reconozco que tengo debilidad por el Papa Francisco. Me encanta lo terrenal y moderno que es. Me gusta su posición sobre los homosexuales y las madres solteras y sobre como la __Iglesia Católic__a debe abrir sus brazos a todos sus hijos por igual. Me parece que es un líder humano y humanitario. Además es gracioso y divertido. La última, es que desde que vive en El Vaticano, ha ganado peso y por la misma razón sus médicos lo han puesto a dieta ¿te imaginas? Igual que a cualquier mortal.
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Y es que el papa Francisco le ha dado por las pizzas y las pastas. Yo en su lugar, si viviera en Italia, también habría hecho lo mismo. Pero resulta que la salud del Sumo Pontífice es asunto de Estado y por eso los médicos de El Vaticano informaron que el Papa fue puesto a dieta.
Pero la dieta del este carismático Papa no es nada estricta ni significa que el Vicario de Cristo pasará hambre. De lo que se trata es de limitar el consumo de los alimentos que lo están haciendo aumentar de peso, en forma progresiva, es decir: esto incluye las pastas y las pizzas, y también los deliciosos alfajores argentinos.
¿Te resulta familiar esta historia? ¡Es la historia de mi vida! Como de todo, pero moderadamente, y especialmente pastas y pizzas, que son mis platillos favoritos de la deliciosa comida italiana que tanto me gusta.
Lo único que me preocupa es que el mismo Papa ha dicho que él sabe que su pontificado será corto, de cuatro a cinco años y aunque parece que hubiera asumido el trono de la Iglesia Católica ayer, lo cierto es que su papado ya lleva más de dos años.
¿Por qué ha dicho esto el Santo Padre? No quiero ser ave de mal agüero, pero seis de los últimos siete papas han terminado su papado al momento de su muerte. El papa Benedicto XVI antecesor de el Papa Francisco renunció al trono.
Con el sentido del humor que caracteriza al actual Primado de Italia, Francisco ha dicho que esa intución, ese "feeling" suyo sobe la duración de su reinado, hace que esté preparado y que si su destino es gobernar por más tiempo, será como un bono, o como ganarse la lotería De lo que se trata es de no tener expectativas muy grandes.
Amo a este Papa. Espero que se pueda comer sus alfajores argentinos de vez en cuando y que Dios le de larga vida para que pueda modernizar a la Iglesia Católica, algo que a todas luces hace falta. No creo que lo de su sobrepeso sea nada grave, pero seguro que perder una libras lo ayudará ahora que también sufre de ciática.
Imagen vía Getty Images
