Recuerdo que yo le hacía piruetas con la cuchara a mi hijo…. "Abre la boca que ahí viene el avioncito", para darle la sopa y los vegetales. Y a él le hacia gracia, y de esa manera, yo conseguía que comiera de todos los grupos de alimentos. Pero cada madre busca sus propios 'trucos' para que sus hijos coman sus raciones saludables de alimentos. Pero lo que acaban de encontrar los investigadores de una Universidad en Illinois me dejado sorprendida. Luego de que realizaran un trabajo de campo, ahora ellos recomiendan a las mamás no decir a los niños que ciertos alimentos son "saludables", porque aparentemente lejos de motivarlos a comer, les causa el efecto contrario. Sigue leyendo porque esto está muy interesante.
Lee Más en ¿Qué Más? : 6 Usos sorprendentes de la vaselina
Concientes de las batallas que deben librar las madres para que sus hijos coman alimentos "saludables" un grupo de científicos de Northwestern University, en Illinois ha hecho un interesante hallazgo que puede ser de mucha ayuda para los padres según información divulgada por Daily Mail.
A un grupo de niños, entre 3 y 5 años, se le dividió en dos grupos. Al primer grupo se le sirvió como merienda un plato de vegetales, y previamente les habían leído cuenton donde el protagonista de la historia consiguió una fuerza enorme para vencer a sus oponentes, gracias a que comían verduras. También les dijeron que si comían muchos vegetales aprenderían más fácil a contar. Mientras que al segundo grupo simplemente les sirvieron unas galletas y no les contaron ninguna historia. Simplemente se las sirvieron como merienda.
Resulta que los niños que recibieron mensajes sobre lo bueno, maravilloso y saludable que era comer sus alimentos, comieron menos su merienda, que el grupo que no recibió ningún tipo de mensaje.
El profesor Michal Maimaran, co-autor del estudio explicó que cuando servimos la comida al niño y le decimos que "eso lo hará más fuerte, o más saludable, o le enseñará a leer, etc", el niño concluye que esos 'alimentos" seguramente no saben bien, y terminan comiendo muy poco.
Por ello, Maimaran aconseja simplemente servir los alimentos al niño y no 'adornarlo' con tanto discurso, a lo sumo decirle, que "eso está muy rico o delicioso".
Los resultados completos del estudio fueron publicados en Journal of Consumer Research.
Así que ya lo saben chicas, no más discursos sobre "lo saludable" de los alimentos a sus pequeños, nada más díganles que todo está "Súper delicioso" y si tienen hambre lo devorarán.
Imagen vía Kids Empowered/Flickr
