Moriré diciendo que de todo se puede hacer en esta vida pero con moderación. Puedo tomarme un par de copas de vino, o un par de mojitos, o un par de cervezas a la semana. No más. Y si estoy en plan de dieta, lo primero que hago es eliminar por completo el consumo de alcohol porque es sabido que al llegar al torrente sanguíneo se transforma en azúcar y ¿quién quiere más azúcar en esta vida?
Está comprobado que el alcohol en exceso tiene efectos perniciosos no sólo para nuestra salud, sino también para nuestra apariencia física. En dos platos: nos hace envejecer y lucir horrendas. Si no me crees, sigue leyendo para que veas por qué lo digo.
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Mira lo que ocurre cuando bebes más de la cuenta:
- La piel se deshidrata y se ve opaca y cansada. En dos palabras, te ves más vieja.
- Se dilatan los vasos capilares y se forman esas odiosas arañitas rojas que te hacen lucir como los borrachos crónicos.
- Puedes comenzar a experimentar síntomas de insomnio o en todo caso dificultad para conciliar el sueño. Así que ten cuidado con aquello de la copita de vino para relajarte antes de ir a dormir.
- Los tragos ocasionan ganas de ir al baño y eso interrumpirá tu sueño, con lo que tampoco tendrás el descanso reparador necesario para sentirte y lucir fresca y joven.
- Por la misma falta de hidratación, el cabello tiende a resecarse. También puedes experimentar una importante caída del cabello.
- La deshidratación que ocasiona el consumo excesivo de alcohol también se reflejará en tus uñas que se volverán quebradizas.
- No sólo el alcohol viene cargado de calorías que definitivamente tu cuerpo no necesita, sino que puede hacer que sientas hambre y además comas en exceso.
Si aún sabiendo todo esto decides tomarte unos tragos socialmente, porque te gusta y lo disfrutas (yo digo que todo con moderación, incluyendo la moderación en sí misma), trata de beber menos de lo que lo haces habitualmente, no cometas el error de beber en casa antes de salir porque seguro terminarás bebiendo más, nunca bebas alcohol con hambre y toma agua antes, durante y después del consumo de alcohol. De esta forma minimizarás los efectos negativos del alcohol en tu organismo y apariencia personal.
Imagen vía Ulcano/Flickr
