Julián Gil teme que hijo que tuvo con Marjorie crezca creyendo que su papá está muerto

El próximo mes de enero Matías Gregorio, el hijo de Julián Gil y Marjorie de Sousa, cumplirá 8 añitos, sin embargo, el menor sigue sin poder ver al actor, quien lleva varios años suplicando por tener un esperado reencuentro con el menor de sus hijos, pero hasta el momento esa posibilidad parece remota y todo se lo deja al tiempo y a la voluntad de la actriz venezolana.

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Hace unas horas en El Gordo y La Flaca, show al que acudió como presentador invitado, el nacido en Argentina habló con Lili Estefan sobre su situación actual y las declaraciones que Marjorie dio en La Mesa Caliente, en donde no quiso ahondar en mayores detalles y llamó a darle tiempo al tiempo cuando fue cuestionada sobre el tema.

Hay que recordar que la historia de amor de Marjorie de Sousa y Julián Gil no terminó de la mejor manera, lo que ha provocado que el exparticipante de La Isla: Desafío Extremo esté ausente en la vida del menor, a quien no ve desde que era un bebé, por lo que desconoce si Matías sabe quién es su papá y si sabe que está vivo… ¿Quieres saber qué más le dijo a ‘La Flaca’ sobre el duro momento que vive como papá? Te lo contamos.

Teme que su hijito crezca creyendo lo peor.

Aunque no ha parado de buscar la manera de hacerse presente para que Matías Gregorio sepa que su papá estuvo ahí, luchando para estar en su vida, hoy por hoy Julián Gil teme lo peor, pues aseguró que no le extrañaría que el menor de sus hijos esté creciendo con una historia que no es real y que le esté haciendo creer que su papá esta muerto o en prisión.

“Supongamos que si el nene sabe que yo soy su papá, cuál es la pregunta que el nene hace: ‘¿Dónde está mi papá?, ¿Por qué no lo puedo ver? ¿Está preso? ¿Está de viaje, vive en Groenlandia o está muerto?’ Si yo soy el papá”, dijo en una conversación que tuvo con Lili Estefan en El Gordo y La Flaca.

No tiene problema alguno con que lo crie la pareja de su ex.

A pesar de que él lo daría absolutamente todo por estar de nuevo en la vida de su hijo, Julián Gil dejó en claro que no está cerrado a la historia de que Matías Gregorio sea criado por la actual pareja de su ex, pero con lo que no está de acuerdo es que se haga borrándolo a él del mapa.

“Me parece genial que esté creciendo con una figura paterna, si no puedo serlo yo, que lo haga el señor, eso no tiene nada de malo, pero el papá soy yo”, lanzó el también abuelo.

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Lamenta que no se le permita estar en su vida.

Si bien es cierto es común que algunos niños y niñas crezcan sin una figura materna o paterna por la decisión de alguno de los dos, en el caso de Matías Gregorio no es por la elección de su papá, a quien se le ha quitado, en contra de su voluntad, la oportunidad de poder estar con él a su lado y en su vida.

“En enero el niño cumple 8 años y cuanto más pasa el tiempo, es menos tiempo que puedo estar, yo ya no tengo 30 años, sí es lamentable”, declaró el también empresario de 54 años.

Sabe que tarde que temprano se dará el reencuentro.

Cada día que pasa es un día menos para la pesadilla que enfrenta Julián Gil, quien aún en la actualidad se sigue cuestionando los motivos que llevaron a Marjorie de Sousa a privarlo de la posibilidad de estar en la vida de Matías Gregorio, a quien vio por última vez hace varios años durante una de las contadas connivencias que tuvieron.

“Mira todo el tiempo que ha pasado y al día de hoy ni yo sé por qué pasó porque ella no ha dado declaraciones”, compartió en la conversación que tuvo en El Gordo y La Flaca.

Quiere dejar lo pasado en el pasado.

Si Julián Gil tiene algo claro en estos momentos es que aún no sabe cuándo se le permitirá estar de nuevo en la vida de su hijo menor, pero lo que sí sabe es que cuando eso suceda dejará el pasado en el pasado y no contaminará al menor con el drama que vivieron sus papás.

“A Mati yo lo que quisiera es empezar una historia desde cero y también se lo digo a ella públicamente, no quisiera sentarme a hablar del pasado, lo que hemos vivido su mamá y yo, me encantaría empezar una historia desde el día que yo esté con él. Quizá, cuando sea grande, que ya pueda entender mucho más las cosas, sentarme con él de hombre a hombre, pero si yo tengo la posibilidad de estar con él mañana o de aquí a un año, yo quiero escribir una historia con él desde ese momento", relató a la vez que aseguraba estar en la mejor disposición de vivir ese proceso de forma pacífica… ¿Será que lo logrará?