No estoy diciendo que estoy de acuerdo con lo que hizo, pero entiendo la frustración del niño de 10 años que llevó una pistola de aire (una BB gun en inglés) a su escuela en Ohio el lunes. Y es que, según la policía, el niño estaba harto de ser acosado por los estudiantes porque usa tobilleras y es pequeño para su edad. Es más, el niño también le dijo a la policía que hace un año los que lo hostigan lo metieron dentro de un bote de basura.
Al parecer, el niño llevó la pistola de balines a su escuela para intimidar a sus acosadores. Aunque no hizo nada con ella, sí se la enseñó a varios alumnos y uno de ellos dijo que el niño amenazó con dispararla si decía algo.
Pero me imagino que el niño nunca pensó que terminaría siendo acusado de inducir pánico al llevar la pistola de balines a su escuela, algo por lo cual ahora será procesado en la corte juvenil.
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Sí bien es cierto que los otros niños deben haber sentido terror al creer que se trataba de una pistola más potente que una de aire, me rompe el corazón pensar por todo el hostigamiento que debe haber pasado el niño para sentir que era necesario llevar la pistola a su escuela.
Gracias a Dios, no pasó absolutamente nada, pero me imagino que ahora la vida de este pobre niño abusado por sus compañeros de escuela cambiará para siempre por culpa de este incidente. Tenemos que encontrar la manera de ponerle un alto al hostigamiento en las escuelas o van a pasar peores cosas que estas.
¿Qué piensas de este caso?
Imagen vía Sorensiim/flickr
