Alaïa ya cumplió sus tres añitos y estamos en plena batalla para que deje el tetero. Es parte de los hitos de la niñez, pero que para ellos a veces conlleva transiciones difíciles. En nuestra labor de padres, es nuestra responsabilidad ayudarlos a dejar atrás algunos hábitos muy típicos de la estapa de bebés: llevar pañales, dormir en una cuna, usar chupete… Les encanta la idea de sentirse "grandes", pero trata de quitarle el tetero o hay llanto, como nos está pasando con Alaïa. Mira el video y seguro te sentirás identificada. ¿Qué has hecho tú para facilitarte estas transiciones?
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Ya su cuartito refleja esta etapa de niña grande, no de bebé.
La redecoración de su habitación era una forma de llevarla de la mano al gran paso de dejar la cuna. ¡Nos encantó lo lindo que quedó el cuarto!
Le enseñamos que las niñas grandes no lloran cuando mamá y papá salen de casa.
Alaïa puede ser toda una niña grande, pero no es raro que todavía quiera expresarse en llanto, como cuando era una bebé.
De los retos más grandes para cualquier mamá ha sido enseñarle a Alaïa a ir al baño.
Paciencia y consistencia. Éstas fueron las claves para ayudar a Alaïa a aprender a usar el inodoro. ¡Qué alegría cuando finalmente dejó de usar el pañal!
Mira cómo la dejamos que desarrolle su sentido de independencia.
Por difícil que se nos haga a mamá y a papá, es importante para el buen desarrollo darle a nuestros hijos pequeños cierto nivel de independencia. Alaïa, como cualquier niño de su edad, quiere hacerlo todo solita. Aquí te muestro cómo la ayudamo en esos primeros pasos a la independencia.
