11 Costos escondidos de una boda

La mayoría de las tiendas de novias no incluyen las alteraciones ni el planchado del vestido, en el precio de compra. Mejor, consulta los costos antes, ya que un simple dobladillo puede valer hasta $100, y el rearmado de un bustier hasta $500, como explica el portal de bodas The Knot, que también brindó los siguientes “gastos escondidos”.

Si tu familia y amigos se quedarán en un hotel durante el fin de semana de tu boda, es normal que quieras recibirlos con unas lindas bolsitas de bienvenida. Eso sí: consulta con el personal del hotel el costo de entregarlas a cada habitación, porque probablemente añadan el gasto a tu cuenta final, y tú ni sabías que debías pagar por ello.

La mayoría de los salones tienen varios floristas, ambientadores, disk jockeys y chefs con los que suelen trabajar, y si quieres elegir uno que no esté en su listado, tal vez debas pagar un extra, que podría ser alrededor del 20% del costo total del servicio.

Para casarte en los Estados Unidos, necesitas conseguir una licencia de matrimonio para que tu boda sea legal. Dependiendo del estado en el que te encuentres y de tu caso particular, podría costarte entre US$ 10 y US$ 115, como explica el portal de leyes matrimoniales US Marriage Laws.

Te cuento mi experiencia, ¿quieres saber en qué pequeño lujo gasté más dinero que nunca durante las semanas previas a mi boda? Pues en taxis, ya que tenía que llevar cosas delicadas como mi vestido, o pesadas como los frascos para la decoración de las mesas, y no podía hacerlo en transporte público. Si no tienes carro, te recomiendo considerar este ítem en tu presupuesto.

Con mi esposo elegimos unas invitaciones súper bonitas, pero bastante pesadas. Lo que no nos imaginábamos, ¡era lo que ese peso extra nos costaría a la hora de enviarlas por correo! Si puedes, averigua los costos de envío que tendrán las tuyas, antes de enviarlas a imprimir.

La noche de mi boda no tenía dinero conmigo y mi esposo tampoco había hecho el tiempo de extraer algunos billetes del cajero automático. Así es que un amigo nos socorrió a la hora de darles propina al chofer de la limosina y a los camareros del salón. Si puedes, recuerda separar un poco de dinero en tu presupuesto para este fin, ¡y llevarlo a la boda!

Al contratar al fotógrafo para mi boda, me pasó un precio por cinco horas de trabajo, y me explicó que si lo necesitaba más tiempo, debería pagar extra. ¿Qué ocurrió? Entre las fotos previas a la boda, las que tomamos junto a la familia, y las largas horas de baile con amigos, finalmente su cachet ¡resultó mucho más alto de lo esperado!

Tu vestido de novia no es el único atuendo que necesitarás para el fin de semana de tu boda. No olvides calcular en tu presupuesto el costo de los conjuntos que te pondrás para tu despedida de soltera, para tu cena de ensayo y hasta para viajar hacia el destino de tu luna de miel. En mi caso, estos atuendos “extras” implicaron un gasto inesperado.

Es muy fácil olvidar que, por cada producto que adquiramos y servicio que contratemos, probablemente tengamos que pagar impuestos. “Por ejemplo, un vestido de US$ 5,000 en Connecticut costará US$ 5,475 con los impuestos de ventas”, explicó la profesora de organización de eventos de la Universidad de New Haven, Ginni Kozlowski, a Money, el portal de finanzas de U.S. News & World Report. Esto variará según cada estado, pero puede ser un gasto importante a considerar.

Muchos salones o empresas de catering cobran aparte algunos servicios. Por ejemplo, es posible que el solo hecho de cortar el pastel de bodas y distribuirlo entre tus invitados, en 2015 te cueste alrededor de US$ 1.46 por porción, como aclara el portal de estadísticas de boda Wedding Stats.