Jenni Rivera habría cumplido 51 años este 2 de julio, una mujer de armas tomar que se ganó el corazón de su público gracias a una autenticidad que la hizo única e irrepetible. La voz de la cantante de Long Beach se apagó demasiado pronto en un accidente de avioneta el invierno del 2012 y su partida todavía nos sigue doliendo. Su leyenda, sin embargo, continúa más vigente que nunca.
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La Diva de la Banda siempre tuvo claro cuáles fueron sus orígenes y nunca trató de ser alguien que no era. Esto hacía de ella una mujer segura de sí misma y sin complejos. Se convirtió por primera vez en madre siendo muy joven y desde entonces supo que su familia sería prioridad. Una cantante que lo dio todo sobre el escenario y a través de su música y entrevistas nos inspiró de una y mil formas. Aquí te traemos algunas de las frases más inspiradoras que nos dejó.
Jenni Rivera siempre tuvo claro sus orígenes
"Que bueno que yo viví en un barrio pobre, en un barrio difícil, donde la vida te enseña a luchar y salir adelante. Esa vida difícil es la que me hizo querer luchar y conquistar más".
Amaba a su familia sobre todas las cosas.
"Ser madre es sin duda mi carrera más importante y la que más me gusta", aseguró Jenni Rivera en una entrevista a la revista Parade meses antes de morir. “Fui dichosa al ser madre y soy súper dichosa al ser abuela", comentó en otra ocasión.
Jenni Rivera pensó en grande desde niña.
“Desde niña, una persona muy importante me dijo lo siguiente: ‘Atrévete a soñar. Piensa en grande, cree en grande’. Y yo lo hice".
La oruga que se transformó en una mariposa.
“Siempre he comparado mi vida con la metamorfosis de una mariposa; mi vida no ha sido nada fácil, ha sido muy difícil. Podría yo comparar mi vida a la de una oruga que se arrastra por los suelos y que sufre mucho y que no es bonita y que le pasan y suceden muchas cosas, pero Dios es tan grande que a través de la metamorfosis, esa oruga se convierte en mariposa. Y llega el momento en que esa mariposa puede volar libre con todos sus colores como lo estoy haciendo yo hoy”.
La Diva de la Banda se lo debía todo a su público.
“Dios me creó, mis padres me concibieron, pero mis fans me hicieron. Les estoy eternamente agradecida. Gracias por aceptarme tal com soy, con mis defectos y virtudes".
Hizo famoso el "sí se puede" antes que Barack Obama.
"Cuando se me empezaron a cerrar las puertas, yo decidí demostrar que sí se podía. Yo era una divorciada, madre soltera de 3 hijos en esos tiempos y de talla 12, no la típica artista que un sello discográfico aceptaría".
Jenni Rivera fue rebelde, parrandera y atrevida.
"Soy parrandera, rebelde y atrevida. Soy rancherota y lo llevo en el corazón. Champagne amarga es pa’ las viejas presumidas… quiero tecate con su sal y su limón”.
La Diva de la Banda tuvo un vida plena.
"No le temo a la muerte. Yo siento que he vivido tantas cosas a mis 42 años; que salí de la pobreza, que saqué adelante a mis hijos, que viví todas las dificultades que he vivido, pero me siento plena, me siento realizada, me siento hecha. Pudiera morir ya y decir: ‘Aquí descansa Jenni Rivera".
Jenni Rivera nunca se sintió acomplejada.
"Yo sólo soy una mujer que ha demostrado que no hay que entrar en una talla 2 para tener éxito en la música", según comentó la artista, quien siempre presumió con orgullo sus curvas.
A pesar de los golpe siempre salió adelante.
"Si por pendeja me caigo, por chingona me levanto", dijo en una ocasión la Diva de la Banda, quien a pesar de los golpes que le dio la vida siempre salió adelante. “Las veces que me he caído son las veces que me he levantado”.
Jenni siempre reconoció sus errores... hasta en el amor.
“No es que no me haya ido tan bien; quizá he elegido mal, pero el amor está ahí… pero es que me encantan los hombres, ¡qué buenos que están!”.
Una mujer que sobre toda las cosas siempre fue madre.
“¿Qué madre no es capaz de partirse la ‘madre’ por sus hijos?”, lanzó Jenni Rivera en más de una ocasión, una mujer que detrás de la fama y el éxito siempre tuvo claro qué era lo verdaderamente importante en su vida.
Siempre tuvo en su corazón a los más desprotegidos.
"Si tuviera la oportunidad de hablar con una jovencita inmigrante que acaba de llegar a Estados Unidos le daría este consejo: 'Pregunta, pide, busca, porque hay oportunidades. Tú no eres la única inmigrante que has venido a este país. Muchos lo han hecho antes que tú y han tenido éxito'".
No tuvo suerte en el amor pero fue fiel a su corazón.
“Una mujer rebelde defiende a su hombre hasta el final. Yo quiero a quien quiero y se acabó”, comentó Jenni Rivera en una ocasión cuando le preguntaron por sus problemas matrimoniales.
Su autenticidad conectó siempre con el público.
"El público ya ha visto muchos artistas fingidos y falsos. Y siento que cuando habla Jenni Rivera, mi público me ve y dice: 'Le creemos'".