Los disfraces de Halloween para bebés más lindos y tiernos

Si de por sí ya provoca comérselos, imagina a estos angelitos envueltos en una tela que los hace parecer un burrito de la cocina mexicana. Adoramos el papel de aluminio envolviendo sus piernitas y el gorrito con el que se completa este combo tan simpático.

Este par de bebitos disfrazados como tazas de sopa son de lo más original que hayamos visto. Los fideos en su cabello con verduras incluidas lo hacen aún más realista. Y por si no bastara una de estas criaturitas para alegrarnos la vida, las tenemos a dúo.

Parece mentira lo increiblemente guapa que luce esta pequeña con su disfraz de cerdita. Como salida del cuento de fantasía en que llega el lobo feroz, pero ella gana porque había construido la casa de ladrillos que el malo de la historia no pudo derribar. ¡Demasiado linda!

Lo único que necesitas para tu bebito o bebita son unos cuantos globos verdes o morados, para hacer que luzca como el propio racimo de uvas naturales. Eso sí, no se te ocurra ponerle globos de helio, no vaya a ser que el bebito salga volando por su peso ultraliviano.

Para el primer Halloween de tu bebé, opta por darle esa apariencia de comida rápida, como lo son los hot dogs. No tiene que ir demasiado decorado, con un toque de mostaza en su trajecito bastará para que luzca apetecible. La sonrisa de este angelito lo dice todo.

Este bebé con tentáculos de pulpo en coloridos lunares entre puras calabazas nos hizo el día. No solo es súper original y divertido, sino que podrás tomarle toda clase de fotos al pequeño. Lo más simpático es que apenas se le va la carita.

Este disfraz de un bebé convertido en zanahoria ya lo habíamos visto antes. Además de ser lindo y colorido, hace que el niñito se sienta súper cómodo y a gusto. Lo mejor es que si sabes tejer podrías hacérselo tú misma.

Estos espaguetis con albóndigas son demasiado tiernos para siquiera pensar en probarlos. Es nada menos que un bebé real dentro de un recipiente, del que se desprende todo este ingenio de sabor. Mira qué divertido puede resultar este disfraz.

Para las familias numerosas hay que tener más de una alternativa. Este bebito parece estar nadando en una piscina de espaguettis y albóndigas y luce súper plácido allí. Lo cierto es que ya está listo para robarse el show este Halloween.

Para formar un rebaño de tiernas ovejitas, o simplemente convertir a tu bebé en una, debes buscar unas copos de algodón de gran tamaño para darles el efecto de la lana, pero eso no es todo. Los lazos rosados y escarpines son el toque alegre del disfraz. ¡Totalmente adorables!

Esta bellísima muñeca parece una Bebé Repollito, gracias a ese cabello, sus ojitos despiertos y mejillas rosadas. La peluca de hilo y el vestido le lucen adorables, y estamos seguras que a cualquier bebita le quedaría estupendo. Como para ponerla en una vitrina decorativa.

Tras mirar esta foto, nos queda la duda, ¿cuál es realmente la muñeca? Las dos, pero aunque la niñita haya querido parecerse al juguete, es difícil elegir a cual le quedó mejor.

Un tiburoncito en casa es una genial idea. Un disfraz que lejos de asustarnos nos atrapa en sus redes de dulzura, inspirando los más dulces pensamientos. El gorrito lo es todo con esos dientes afilados, y el bebito parece saberlo.

¿Has visto algo más parecido a un patito que este disfraz? El ave no podría estar mejor representada en esta bebita, a la que solo le falta expandir sus alas para hacernos creer que es real. ¡Qué cosita linda y coqueta!

Este minipiñita es un favorito entre los papás, por su originalidad para representar a la fruta tropical dulce y ácida, con su típica corona. El bebito lo lleva con fashionismo y ni que decir de sus lentes de sol. ¡De aquí para Hollywood!

Para recrear este disfraz, todo lo que necesitas es fieltro rojo y blanco para forrar el portabebés como el envase para las palomitas, y luego colocarle al bebé un gorrito con unas cuantas palomitas reales. Sencillo y original para tu pequeñín.

La apariencia de estas dos criaturas es lo máximo. La vaca y el pollo que van juntos a todas partes y aunque no parezcan muy contentos con sus disfraces, se roban todas las miradas. La mascotica y el bebé pasarán grandes momentos vestidos así este Halloween.

Esta bebita está demasiado pequeña para comer chicles, pero no para vestirse como una máquina dispensadora de gomas de mascar. Todo lo que necesitas para lograr este disfraz es fieltro rojo, blanco y negro, una plantilla con números, goma y pompones para el gorrito.

Aquella creencia de que el león domina a la manada no podía ser más cierta. El pequeño leoncito en el césped tiene el mundo en sus paticas, y en esa melena tan adorable donde lejos de rugir, se dedica a contemplar a sus amigos de la selva.

La legendaria criatura mitad mujer mitad pez, es una linda alternativa para niñitas. Como en la mejor de las historietas la bebita lleva una lustrosa cola azul y reina con esa coronita de brillantes y estrellas.

La tradición otoñal encontró eco en este disfraz de un bebito dentro de una calabaza, ¡vestido de calabaza! Una idea que nos encanta y que se merece todos nuestros aplausos. Por si fuera poco, el bebito luce demasiado tierno allí adentro.

Cuando sea grande, la bebé de esta foto podrá comprender mucho mejor este disfraz tan gracioso. Reflejándonos a nosotras mismas cuando no nos ha dado tiempo de quitarnos los rollos ni de vestirnos, y nuestro look es un verdadero desastre. Ciertamente a la princesita le luce mucho mejor, especialmente con esas gafas oscuras.

Los murciélagos son infaltables en la noche de brujas, pero este en particular nos parece un encanto. Nada que ver con los murciélagos que nos dan miedo en las películas de terror, o en las decoraciones más escalofriantes. Este bebito con alas y orejitas es encantador, y podríamos pasarnos horas contemplándolo.

Un minibuzo es una idea super ingeniosa, y tan fácil de hacer que no podrás creerlo. Solamente necesitas una botella plástica de dos litros de gaseosa y spray plata para pintarla. Un cable que conecte con el chupón. Una máscara de dormir para recrear los lentes de buceo, y ropita negra para el bebé. ¿Así o más adorable?

A esta bebita le escogieron un disfraz con ángel y personalidad, el de una pequeña mariposa de grandes alas naranja y negro, cocoliso negro, y una diadema con antenas para completar su look. Tan divina que no podemos dejar de admirarla.

Dime que esta no es la flor más adorable de todas. Claro que sí, es tan linda y llena de vida que inspira en el look de esta bebecita. El toque divertido lo tiene en los coquitos alrededor del disfraz, parece que no se resistieron a venirse con ella.

Este disfraz se lleva todos los puntos en creatividad y el resultado es una belleza. No sabemos cómo el bebé fue a parar allí, pero sin duda todos voltearán a verlo. El queso no podía faltar y con esa carita, seguro tendrá toneladas de queso más.

Para las madres que saben tejer, este modelito será algo muy tentador para colocarle al bebé. Inmerso en ese cono de barquilla que aparenta ser de fresa y menta, y crema chantilly al tope coronada con una cereza, es un precioso disfraz. Si el bebito tan solo imaginara lo adorable que luce.

Para los amantes de la langosta, tenemos a este divertido bebé saliendo de una olla. Un disfraz súper económico que vale oro por lo ingenioso que resulta. ¿Dime que el bebé no está para comérselo? De haber un concurso de disfraces este quedaría en los primeros lugares.

Este mini cocinerito está listo para preparar unas delicias de la comida italiana con las cuales deleitarnos. Su gorro es casi más grande que él y lo mejor es que no tuvo problema alguno en embarrarse un poco. Todo se vale para este pequeño chef de la familia.