Cuando tu confías en que eres una mujer merecedora de los dones que la vida te otorga, de la abundancia que el universo pone siempre frente a ti y de la prosperidad que te rodea, puedes lograr lo que te propones. Al enfocarte, estas programando a tu mente para atraer como un imán poderoso que puede transformar tu vida de la forma que tu quieras y que necesites. La buena suerte tiene un gran toque de mente positiva y esta se logra cuando afirmas, decretas y te concentras en aquello que quieres obtener. Así que todos los días durante las mañanas, después de una respiración muy profunda o todas las noches antes de dormir intenta pronunciar en voz alta estas afirmaciones que te comparto.
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Los pensamientos positivos siempre van a traer transformaciones en tu mundo interior y por lo tanto se verán reflejadas en tu mundo exterior. La suerte la puedes crear todos los días porque es algo que se atrae no es algo que se persigue.
Debes tener muy claro lo que quieres para ti, para los tuyos y para tu vida misma, de esta manera estarás siendo concreta y podrás afirmar con convicción cada decreto de abundancia. Una vez que tienes la claridad de tu mapa de vida todo lo que tu mente genere te llegará rápidamente. Pon en práctica esto que te propongo.
Suelto todos los bloqueos que me impiden ser y vivir en abundancia.
Existen muchas creencias limitantes que vamos heredando o que vamos desarrollando de acuerdo a nuestras circunstancias de vida. Los pensamientos que impiden que la energía fluya en tu interior, pueden ser los causantes de que no te sientas lo suficientemente merecedora para recibir. Así que descubre qué es lo que te impide sentirte abundante y suelta esos bloqueos.
Soy una mujer próspera y todo lo que toco lo convierto abundante
Es como el Rey Midas, que todo lo que tocaba lo convertía en oro, sin embargo, es importante que al pronunciar este decreto siempre te visualices en armonía contigo y con todos, que siempre sea de acuerdo a una voluntad superior y que sea algo que no perjudique a nadie. Hay una línea muy fina que no debes cruzar y es la línea de la ambición.
Mi riqueza interior atrae a mi riqueza exterior.
Si te sientes bien contigo misma, si aprendes a conectar con tu propia sabiduría interior, si logras tocar con tu potencial y amor propio, podrás reflejar toda esa riqueza hacia tu exterior y de esa forma provocarás que la energía positiva que emane de ti regrese también a ti como un efecto boomerang que te llevará a la experiencia diaria de vivir en plenitud.
Vivo mi vida con plenitud y prosperidad siendo feliz haciendo lo que hago.
Hacer comienza por el ser, si tu utilizar la fórmula SER-HACER-TENER, lograrás muchas cosas, pero sobre todo estarás atrayendo a tu vida a personas, situaciones o experiencias que se acomoden perfectamente a lo que tu necesitas para volar. Todo en el universo se rige por leyes y la ley de la atracción comienza por una sensación, lo demás llega como efecto de dicha sensación. Hacer, comienza porque sientas tu ser en sus infinitas posibilidades de triunfo.
Mis dones son el puente para dar y recibir la abundancia de la vida como regalo.
Es importante que más allá del dinero, te centres primero en desarrollar los talentos que la vida te dio para que puedas desarrollarte en plenitud y esto se vea reflejado en tu prosperidad. Si tu dedicas tu vida a dar lo que tienes que dar para otros desde tus dones, por efecto implícito, el universo te regresará con abundancia y prosperidad todo eso que das con amor y con entrega porque estás cumpliendo la misión para la que fuiste designada.
El dinero aporta cosas positivas a mi vida y llega en armonía.
El dinero no lo es todo en la vida, el dinero es el instrumento y la herramienta que te permitirá lograr muchas cosas, sin embargo, no debes confundir el dinero como todo lo que te dará prosperidad. Las cosas positivas que lleguen a tu vida serán el efecto de una actitud positiva y de la confianza que tengas en ti misma. Es importante que el dinero no desequilibre la armonía en todos los ámbitos de tu vida, así que concéntrate también en tu equilibrio.
Puedo, quiero y merezco ser abundante.
Cuando pronuncies esta frase, cierra tus ojos, haz contacto con los latidos de tu corazón y sé consiente de tu respiración. Recuerda un evento en tu vida donde hayas logrado lo que te proponías, siéntete poderosa, llénate de fuerza y afírmala 3 veces.
Hoy estoy dejando que mi luz brille en todo momento.
Todos tenemos un potencial maravilloso, el único problema es que a veces no confiamos en nuestras capacidades. Tú misma puedes esconder tu luz y quizá no te estés dando cuenta. Alguna vez has dejado que tu luz brille al máximo, así que trae el recuerdo y afirma 3 veces.
Todo lo que estoy dando, siempre regresa a mí en muchas formas y en la misma intensidad.
La ley del dar y recibir debe estar en equilibrio para que la balanza se manifieste en tu abundancia. También aplica para malos deseos o malos pensamientos así que ten cuidado con aquello que das y procura que siempre sea amor y comprensión para que pueda ir y regresar sin dañar.
Soy capaz de realizar todas mis metas y todos mis sueños.
En alguna ocasión una maestra muy querida me dijo que siempre que deseara algo con todas mis fuerzas, visualizara mi deseo cumplido y al final de la afirmación repitiera: Mi deseo se materializa en armonía con todo el mundo, de acuerdo a la voluntad del todo, de manera perfecta.
Yo me siento totalmente dispuesta a recibir todos los regalos de abundancia que la vida me regala.
Sentir que puedes recibir necesita que te liberes de todo sentimiento de culpa que te limita justamente a eso, a recibir. No vayas a bloquear tu energía y quítate cualquier lastre emocional que impida el paso a lo que quiere llegar a ti.
El universo es ilimitado y mi abundancia es ilimitada, hay abundancia para todos.
Cuando pronuncies esta afirmación cierra tus ojos y conecta con una situación en tu vida donde te hayas sentido sumamente completa y feliz. Ánclate a la sensación, ponle un color con tu imaginación y respíralo tres veces.
Grandes cantidades de dinero vienen hacia mí, en armonía con todo el mundo y de manera perfecta.
Dicen que el dinero no compra la felicidad y estoy de acuerdo, aunque también estoy muy convencida de que te libera de muchas preocupaciones que te permiten realizarte. No olvides pedirlo en armonía para todos.
Yo tengo riqueza y abundancia en todas las áreas de mi vida.
Puedes tener mucho dinero, pero no mucha salud o sentirte sola y vacía. El equilibrio perfecto está en que valores la riqueza que tienes en cada área de tu vida y notarás cómo cada vez crecerá la sensación y tu realidad abundante en todo lo que te rodea.
Hoy mi día está lleno de oportunidades y abro mi corazón para recibirlas.
Esta afirmación te ayuda a poner los reflectores en todo aquello que sí tienes en la vida y que además debes de agradecer para que crezca. Agradece al cosmos, a la vida o a Dios, tú eliges. Abre tu corazón para ver todas tus bendiciones.