Ahorrar casi nunca es fácil, en especial cuando no tenemos grandes salarios. Sin embargo, habemos personas que nos lo hacemos más difícil con malas decisiones o hábitos. Pero lo cierto es que no es complicado guardar un poquito de dinero y te voy a explicar cómo hacerlo.
Más en MamásLatinas: 8 Cosas que debes saber sobre las cuentas de ahorro
A veces hay cosas en las que no pensamos (en lo que ahorrar se refiere) que podrían estar causando que derrochemos más dinero del que nos damos cuenta. Algunas cosas son simples, como pagar las cuentas tarde, por ejemplo, pero otras son un poco más complejas. Aunque eso no quiere decir que no lo puedas hacer.
A continuación, ocho errores que seguramente estás cometiendo y que no te permiten ahorrar. Presta atención y verás que en poco tiempo podrás comenzar a ahorrar y te sentirás en completo control de tus finanzas.
Despreocuparte por llevar las cuentas, es decir, no saber cuánto entra y cuánto sale.
Cuando vas anotando lo que entra y lo que sale financieramente de tu cuenta familiar irás tomando control. Es la única forma de saber por dónde se va el dinero y en qué se puede ahorrar.
Pagar demasiado en vivienda, lo que causa que no puedas cubrir los otros gastos.
Los profesionales de las finanzas personales recomiendan que el costo de la vivienda no supere un tercio de los ingresos familiares. De lo contrario tendrás problemas para cubrir el resto de los gastos y, por consecuencia, no podrás ahorrar.
No aprovechar la tecnología bancaria que te puede ayudar a ahorrar sin que te des cuenta.
Hoy en día puedes transferir fondos de una cuenta a otra con tan solo apretar un botón o, hasta más fácil, puedes establecer una deducción automática de tu cuenta corriente a la de ahorros todos los meses. Ni te vas a dar cuenta lo que hará más fácil que no lo toques.
Ignorar el presupuesto y olvidar la disciplina.
Yo era la peor con esto, así que no te sientas con culpa, lo importante es que trates de disciplinarte un par de meses y verás lo rico que es llegar a fin de mes cómoda y con dinero ahorrado.
Depender de las tarjetas de crédito sin pagar el saldo todos los meses.
Todo lo que compras con tarjetas de crédito te sale más caro, a menos que lo pagues ese mismo mes. No creas que por usarlas te estás ahorrando el efectivo. Los intereses se van sumando.
Pagar las cuentas tarde y acumular cargos por mora.
Nada arruina más rápido el crédito que la mala costumbre de atrasarse en el pago de las cuentas, incluyendo los servicios para la casa. Hoy en día hasta te reportan si pagas tarde la luz y el teléfono. La consecuencia de esto es que cualquier préstamo, así sea con las tarjetas de crédito, te saldrá más caro porque te suben los intereses. Eso quiere decir que tendrás menos dinero para ahorrar.
Ignorar los planes de retiro porque crees que todavía falta mucho para tu vejez.
Aunque parezca imposible ahorrar y te parezca que falta mucho para la vejez, es más importante guardar dinero para la jubilación que para la universidad de tus hijos. Lo digo, porque para el college hay préstamos, pero no para vivir durante los años dorados. Además, hay varios instrumentos financieros para poner el dinero en el banco y que no te cobren impuestos por él.
No tener seguros, lo cual significa no estar preparado para una emergencia.
Los peores reveses financieros son los inesperados. Mi cuenta de ahorros se vio en cero más de una vez después de una visita al ER o un choque, en la época en la que pensé que no valía la pena pagar por un buen seguro de autos o médico. Finalmente, me di cuenta de que es mejor destinar un poco cada mes a esto, que verse con unas cuentas grandísimas que no estaban en los planes.