Las mujeres podemos tenerlo todo: éxito profesional y personal

He leído un libro que me ha tocado tan profundamente. Se titula"Lean In", escrito por Sheryl Sandberg, la directora de operaciones de Facebook. No sólo me sentí validada sino que también me inspiró para continuar a transmitir mis creencias y aprendizajes a mis hijos, especialmente a mi hija.

Sheryl anima a las mujeres a que levanten la mano y a no tener miedo de hablar, buscar desafíos y asumir riesgos. Ella utiliza anécdotas personales y datos para demostrar que seguimos viviendo en un mundo dominado por hombres, donde sus normas y "barreras internas" conspiran para impedir que las mujeres se realicen de manera personal y profesional. Hoy las mujeres en este país representan más del 50% de los graduados universitarios y trabajadores; sin embargo, los hombres ocupan la mayoría de los puestos de liderazgo.  ¡El número de mujeres en esos puestos sigue disminuyendo!

Lee más en ¿Qué más?: Entérate de por qué los hombres siguen gobernando el mundo ¡Y nosotras lo permitimos!

Me siento muy afortunada de tener padres que siempre alentaron a mis hermanas y a mí a aspirar a metas que en mi época, sólo los hombres aspiraban. ¡Desde chica, yo soñaba con ser Presidente de Chile! He conocido a muchas mujeres latinas que fueron disuadidas de ir a la universidad porque sus familias creían que sería una "pérdida" el invertir su dinero duramente ganado en una mujer que se quedaría en casa para cuidar a los niños. No me malinterpreten. No es que yo creo que todas las mujeres deberían trabajar y enfocarse en tener una carrera, pero sí creo que todas las mujeres deberían tener la oportunidad de tomar esta decisión por su cuenta! También le doy mucho crédito a mi éxito profesional a mi gringo con quien me casé! Él ha sido un socio increíble durante toda mi carrera. Las veces que dudaba de mi decisión de seguir mi carrera profesional exigente, no sólo proporcionaba el apoyo emocional que necesitaba pero además asumía las responsabilidades del cuidado del hogar y los niños.  Algo que pocos hombres harían. Cuando mi hijo fue diagnosticado sordo, yo tenía amigas que me juzgaban por ser demasiado ambiciosa y por priorizar mi trabajo.

Fueron mi madre, mi esposo y mi jefe los que me insistieron que siguiera  trabajando en lugar de dejar mi trabajo. Probablemente hubiera resentido a mi hijo por tener que renunciar a lo que yo había trabajado tan duro para lograr -yo acababa de recibir una gran promoción-.

La única manera que vamos a cambiar las barreras que enfrentan las mujeres que estén considerando entrar en la fuerza de trabajo y desarrollar una carrera es que hayan más mujeres en puestos de liderazgo para que puedan volver a escribir las reglas sobre lo que se necesita para ser un líder, así como la definición de éxito.

Imagen vía Thinkstock