¿Rochitas rojas en el cuerpo? ¡Cuidado! Más de 100 casos de sarampión han aparecido en Estados Unidos en el mes en enero. El hecho ha prendido las alarmas en la Casa Blanca, al punto, que el Presidente Barack Obama ha pedido a las madres que vacunen a sus hijos para mantenerlos al margen de la enfermedad viral. Al parecer el brote se originó diciembre 2014, por unos turistas que visitaron los parques de Disney en California. Entérate de cuáles son los síntomas, cómo prevenirla y su tratamiento.
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El sarampión es una enfermedad viral altamente contagiosa. Se propaga por contacto con secreciones provenientes de la boca, nariz y garganta de una persona infectada, así lo indica el sitio 'MedLinePlus', de la Biblioteca Nacional de Medicina.
Y si alguien sin protección, es decir, que no esté vacunado, comparte el mismo recinto, con un infectado y ésta persona estornuda, rápidamente se contagia.
Pero, ¿quiénes son inmunes a la enfermedad? Solamente aquellas personas que ya han tenido la enfermedad, porque da una sola vez, y las personas que han sido vacunadas.
Pero hablemos de los síntomas del sarampión.
Una vez que se produce el contagio, los primeros síntomas aparecen entre 8 y 12 días después, a esto se le conoce como 'período' de incubación.
Los síntomas generalmente comienzan de 8 a 12 días después de la exposición al virus, lo que se denomina período de incubación.
Estos son los principales:
– Tos
– Fiebre
– Dolor de garganta
– Aparecen unas manchitas rojas que se esparcen por todo el cuerpo.
– La erupción cutánea o manchitas, pueden estar acompañadas por picazón.
– Los ojos se tornan enrojecidos.
– Alta sensibilidad a la luz.
– Puede durar unos 7 días.
No existe un tratamiento como tal contra el sarampión. Los médicos por lo general mandan Tylenol para bajar la fiebre y aliviar los síntomas, más reposo absoluto. Pero si hay complicaciones, especialmente en los niños, podrían estar en riesgo de muerte. Ante los síntomas se recomienda acudir al médico.
Se ha podido conocer que algunos padres no ponen la vacuna contra el sarampión, paperas, y rubéola por temor a que estos puedan desarrollar autismo. Pero estudios recientes demuestran que no hay conexión entre el autismo y la vacuna triple.
"El paso más inteligente que cada persona puede tomar para protegerse a sí mismo de esta creciente amenaza sanitaria es vacunarse", indicó el doctor Alan Pillersdorf, presidente de la Asociación Médica de Florida a Univisión. Vacuna a tus hijos, es la única manera de protegerlos contra estas terribles enfermedades.
Imagen vía Thinkstock