Lo orgánico y ecológico se ha convertido es más que una simple moda –incluso cuando se trata de tu rutina de belleza-. Hacer tus propios cosméticos no sólo te ahorra tiempo y dinero, también te protege de los molestos y dañinos químicos que están presentes en el 95% de las marcas actuales. ¿Loca? Tal vez. Pero no creerás cómo aprovecho los desperdicios de frutas y vegetales que quedan en mi nevera.
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Remolacha
Es una de las raíces más versátiles. El betabel, como también es conocido, ofrece un color vibrante -¡que no se va así nada más!- haciéndolo ideal para días de calor, de playa o simplemente cuando busques un maquillaje duradero*. ¿Mi idea?* Utiliza la remolacha cruda (un pedacito es suficiente) para darle color a tus mejillas y labios. Mientras más frotes, más fuerte será el resultado. ¿Herviste los betabeles? Enjuaga tu cabello para revivir los tonos rojizos.
Mora negra
El blackberry es una de mis frutas favoritas. Primero porque puedes hacer batidos deliciosos y segundo porque es una alternativa segura a los rímeles de pestaña. Antes de que te caigas para atrás, déjame explicarte: los pigmentos y la textura de las moras son tan fuertes que fácilmente define tus pestañas sin necesidad de químicos. Toma un par de moras congeladas, májalas y con un hisopo de algodón, aplícalo a lo largo de tus pestañas. Espera que se seque y encréspalas con un rizador. ¡Perfecta para ojos sensibles o con lentes de contacto!
Fresas
El tono rojo vivo de las fresas te permite conseguir un look sensual, muy al viejo Hollywood. De nuevo, toma la fruta congelada, májala con un tenedor y aplícalo directamente en tus labios. Gracias a la textura pegajosa, tendrás el acabo de un brillo labial… ¡justo como el que compras en farmacias!
Spirulina
La Spirulina es un alga que contiene ingredientes súper poderosos para nuestro cuerpo. Pero también es un campeón cuando se trata de crear nuestro propio maquillaje. Como viene en polvo, fácilmente puedes mezclarlo con las frutas anteriores para darle profundidad al sombreado. Me gustó muchísimo para delinear los ojos: haz una pasta con la mora negra y un poquito de spirulina y, con un aplicador, comienza a delinear tus párpados de la forma que quieras. ¿Deseas que tus cejas resalten? Experimenta con spirulina y moras de cualquier color hasta encontrar el que se adapte a tu tono natural.
