El contador venezolano Nick Hernández, quien lleva 10 años casado con Carolina ‘La Venenosa’ Sandoval, recurrió a sus redes sociales para contar su verdad sobre todo lo que estaría pasando entre él y la famosa presentadora de televisión, luego de que ella rompiera el silencio en ¡Siéntese Quién Pueda!, programa de Univision del que forma parte y donde tuvo oportunidad de compartir su versión sobre la demanda de divorcio que él ingresó hace unos días.
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Las declaraciones de la también influencer no cayeron nada bien en Nick, quien decidió defenderse y lo hizo a través de un video de media hora lanzado en su cuenta de Instagram. Ahí hizo un resumen de los inicios de su relación, los motivos por los que se casaron, pero también de los momentos turbios que vivieron en el ámbito financiero, pero también familiar… ¿Quieres saber qué reveló y de qué manera las decisiones de ella afectaron a su única hija en común? Sigue leyendo.
Hay que recordar que Nick ingresó la demanda de divorcio el pasado 18 de noviembre, pero no fue, sino hasta unos días después, que esta se hizo pública. En ese entonces la también influencer aseguró que la decisión de su aún esposo la había tomado por sorpresa y que se enteró de todo a su llegada a Madrid, España, en donde está actualmente en compañía de su mamá y de Amalia Victoria, su hija menor, pero él la desmiente y la exhibe frente a todos en su revelador video. Ambos aseguran tener la verdad de su lado… ¿será?
Asegura que sí estaba enterada de la demanda de divorcio.
A pesar de que ‘La Venenosa’ aseguró que se enteró por los medios de comunicación de la demanda de divorcio que ingresó su aún esposo el pasado 18 de noviembre, Nick Hernández ya la desmintió y aseguró que la mamá de su hija menor está montando una telenovela donde no la hay, pues, afirma, que estaba más que enterada de sus intenciones de dar por terminado su matrimonio.
“Ella lo sabía, yo se lo expliqué, se lo mandé por correo, se lo mandé por WhatsApp, se lo llevaron verbalmente que estaba en proceso, se lo expliqué a su mamá. Ahora, cuando veo las redes sociales y veo que ella tenía una cara de inocencia y dice que yo no sé nada. Me acuerdo que ella siempre dice que ella es muy buena actriz, entonces lo que está haciendo es ser buena actriz, está fingiendo todo esto porque esa no es la verdad”, respondió ante los dichos de su aún esposa en sus más diversas intervenciones.
Confesó que el tema económico ahogó su matrimonio.
A pesar de que asegura seguir amando a la mamá de su hija menor, Nick se sinceró y en su video compartió que su matrimonio se vino abajo cuando comenzaron a enfrentar problemas económicos originados, principalmente, por la obsesión de ella de llevar una vida de lujos y muchísimo despilfarro.
“Yo la amo y la quiero mucho, pero la finanza ahoga esta relación porque tú no puedes demostrar cosas que tú no eres. Tú no puedes mostrar que eres millonaria, entonces cuando yo le decía que había que corregir ciertas cosas, ella me decía que yo era un bate quebrado, que yo con esa mentalidad paupérrima no iba a conseguir las cosas”, se le oye decir en otro fragmento de su material.
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Ella insistía en vivir en una realidad que no era la suya.
Aunque económicamente no les iba del todo mal, la realidad es que la vida que aparentaba llevar Carolina Sandoval estaba muy alejada de su realidad, lo que los llevó a verse inmiscuidos en verdaderos problemas financieros. Nick destacó, entre algunos gastos innecesarios, el Porsche que la influencer le compró a Bárbara Camila, su hija mayor; la escuela carísima en la que inscribió a Amalia Victoria a escondidas de él; el departamento que alquilan en Madrid y que ocupan muy pocas veces al año y qué decir de sus vuelos en primera clase a Europa.
“Yo fui a hablar con asesores financieros, fui a hablar con abogados de bancarrota, fui a hablar con un abogado de familia, y todos decían que había que soltar los gastos, entonces tener un apartamento de esa magnitud en Madrid, en donde no se vive allí es una locura… Bueno, resulta que entonces el presupuesto que era para pagar la casa está en el gasto del colegio que no necesitamos, de carros que no necesitamos, de un apartamento que no necesitamos, pero la responsabilidad es mía”, detalló sobre la crisis económica en la que cayeron y de la que a él se le hizo responsable.
Él quería inscribir a Amalia Victoria en una escuela pública.
Consciente de que los gastos que realizaban estaban por encima de los ingresos que recibían fue que a Nick se le ocurrió cerrar la llave y pedirle a su aún esposa que inscribieran a Amalia Victoria en una primaria pública y ya más adelante, cuando todo estuviera mejor, que le dieran educación privada, sin embargo, esta no solo se negó, sino que la inscribió en una de las primarias más caras de la Florida.
“Habíamos acordado que ya que salgamos del año escolar de Amalia Victoria vamos a inscribirla en un colegio público, más adelante invertimos más en su educación en algo privado. La sorpresa es que de la noche a la mañana parece que inscribió a la niña a un colegio privado que cuesta US$2,000 mensuales, es prácticamente la mensualidad de una universidad… Otra vez las decisiones financieras no son mías, son de ella”, reiteró.
Le mintió con su renovación de votos.
En otro fragmento de su video Nick habló de la famosa renovación de votos que celebraron en Madrid hace unos meses y que significó su tercera boda. Esta unión se llevó a cabo cuando ambos ya enfrentaban rumores de crisis en su matrimonio y él mismo reconoció que, efectivamente, no estaban nada bien para aquel entonces, pero que aceptó hacerlo porque ella le había dicho que sí irían a terapia de pareja, tal y como él se lo había pedido, pero fue algo que nunca ocurrió.
“Hice el ridículo con la renovación de votos en Madrid, para demostrarle mi amor, que mi disposición de salvar este matrimonio, pero con la condición de que hiciéramos terapia familiar. Pueden creer que fue un engaño, lo hizo para hacer redes sociales”, se dijo decepcionado con la forma en que Carolina facturó con algo que tenía como fin salvar lo que algún día hubo entre ellos.
Señala que ella se la vivía divorciándolo.
Aunque frente a las cámaras y en las redes sociales Carolina fingía que todo estaba bien con su matrimonio, Nick compartió que en el 2024 se la vivió amenazándolo que se quería divorciar y lo hizo tantas, pero tantas veces, que ya hasta perdió la cuenta de las ocasiones en que se lo dijo.
“En el 2024 las veces que me ha dicho que se quiere divorciar, ya perdí la cuenta de cuántas veces, y lo que yo le digo es: ‘Bueno, mira, trabaja con varios abogados aquí, hagamos algo, vamos a tratar de negociar con ellos, una empresa de intercambio que nos divorcien en buenas relaciones, que sea un mutuo acuerdo para no tener que gastar plata en un divorcio’, pero no quiere tampoco”, se le oye decir, a la vez de compartir los motivos por los que decidió solicitar abogados de oficio, pues no cuenta con los ingresos económicos para pagar un juicio.