Recientemente fui a la presentación de productos Sol de Janeiro en la Swim Week de Miami, en donde nos contaba cómo eran las brasileñas a diferencia de otras latinoamericanas. Y creo que, al menos yo como mexicana, tengo mucho que aprenderles. ¡Toma nota!
Aceptan su cuerpo
La embajadora de la marca Camila Pierotti comentó que las brasileñas están orgullosas de su cuerpo tengan la figura que tengan, sean altas, bajitas, grandes o chiquitas. Es algo que sin duda tenemos que aprenderles pues no es lo que sucede precisamente en otras culturas.
Y lo presumen
Y no solamente están orgullosas, siempre aprovechan la oportunidad para presumirlo.
Se ponen bikinis chiquititos
Para mí, que el mostrarme en traje de baño ha sido todo un proceso, realmente admiro a una mujer que sepa llevar un bañador tenga la figura que tenga. Y las brasileñas son las maestras en este tema.
No se cansan de bailar
Y finalmente creo que una cosa va relacionada con la otra. Te gusta tu cuerpo, le das un buen uso y tu cuerpo luce en su mejor versión. Y qué mejor que bailar, divertirte y pasar un buen rato para lograr todo esto.
Cuidan sus pies
Al tener una cultura en la que la playa es parte de su vida, las brasileñas tienen especial cuidado con sus pies.
Y también su bum-bum
Antes de Kim Kardashian y Jennifer Lopez, yo en verdad ni siquiera estaba consciente de mi bum-bum. Era una parte de mi cuerpo ignorada totalmente. Pues las brasileñas, por lo general lo aman, lo muestran y le dan cuidados especiales.
Están orgullosas de su sexualidad
Y bien, es tanta la aceptación y amor que tienen por su cuerpo, que obviamente la sexualidad es algo natural que forma parte de él.
Saben hacerse tiempo para estar con su pareja
Y sí, aunque lleguen los niños, siempre la pareja tiene un lugar muy importante y las brasileñas no sólo lo dan, sino que exigen ese espacio.
Para divertirse no hay edad
Así como no importa la figura, tampoco importa la edad a la hora de divertirse y pasar un buen rato.
Se dan tiempo para el descanso
En Brasil el domingo es sagrado. Así es que si tienes pendientes, esos se hacen el sábado. Definitivamente saben tomarse ese día de descanso para reparar energías que todos necesitamos, y que, al menos yo, rara vez me tomo.
