Con las fiestas a la vuelta de la esquina, seguramente querrás tener tu casa limpia y ordenada para recibir a las visitas o simplemente disfurtar al máximo de la calidez de tu hogar con la familia más cercana. No obstante, esto no significa que desees pasar mucho tiempo recogiendo y limpiando.
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Por ello, existen unos sencillos consejos que puedes seguir para que todo quede impecable antes de que tus seres queridos lleguen para celebrar estas fechas tan señaladas junto a ti. Dedicar un rato para aspirar toda casa, limpiar el refigerardor antes de los días señalados o aprovechar el día de colada para organizar los armarios, son acciones que te ahorrarán tiempo y esfuerzo. No olvides involucrar a tus hijos en el proceso asignándoles tareas como recoger sus habitaciones o limpiar los espacios menos usados y muchas veces olvidadeos de tu hogar, como puede ser el trastero o el clóset donde guardas las sábanas o toallas.
Aspira toda la casa el mismo día.
No necesitas aspirar el mismo día que limpies y recojas la casa, puesto que tanto esfuerzo puede ser abrumador y muy cansado ¡y seguramente terminarás de mal humor! Aspira un día únicamente y si es el más cercano a la visita que esperas, mejor.
Si tienes mascotas, no olvides pasar la aspiradora por sofás, sillones y aquellos rincones menos accesibles como las esquinas o detrás de los muebles.
Recoge el armario al mismo tiempo que haces la colada.
Recoger la ropa después de lavarla y organizar los armarios suele ser una de las tareas más tediosas del hogar, especialmente si tienes que planchar la colada antes de guardarla en tu clóset. Normalmente es una cosa que no haces tan regularmente pero, si doblas y guardas la ropa en el armario, una vez que las sacas de la secadora, tu casa perdurará limpia y ordenada más tiempo.
Organiza tu refrigerador y tira los alimentos que han expirado o están en mal estado.
Las verduras y las frutas suelen ser de los alimentos que más rápido se pudren si no las consumes a tiempo. Un par de días antes de las fiestas, saca aquellos productos que no vas a comer, que están malos, o bien, que se vencieron en el refrigerador. Limpia luego con un trapo aquellos líquidos que se hayan derramado y evita así los malos olores. Seguramente tus seres queridos acabarán abriendo la nevera y si encuentran todo recogido y organizado, provocarán menos desastre en ella.
Involucra a tus hijos para que limpien a fondo su habitación.
Tus hijos deben saber que tener su habitación ordenada y limpia debe ser una de sus principales obligaciones desde que son pequeños. Hazles recoger a fondo su dormitorio puesto que quizás alguna de las visitas tengan que dormir con ellos durante unos días. Deben quitar el polvo y ordenar sus cosas y tirar o donar aquello que ya no usan.
¡No te saltes los espacios olvidados de la casa!
Haz que los más pequeños de la casa den un repaso por aquellas zonas de la casa que no se frecuentan tanto. Por ejemplo, si tienes trastero asegúrate que lo organizan. Pídeles que limpien por debajo de las alfombras o mándales a ayudarte organizando cajones de baños o cocina. Son tareas fáciles que podrán realizar desde una pronta edad.
Ajusta la humedad de tu casa para que esté libre de polvo por más tiempo.
Cuando el nivel de humedad en tu casa es bajo se crea electricidad estática que además de atraer el polvo, hace que se pegue y sea difícil de eliminar. Esto sucede especialmente cuando hace frío fuera y tienes que poner la calefacción. Por ello, lo mejor es mantener tu hogar con un nivel de humedad entre el 40% y el 50% para eliminar la electricidad estática y evitar la acumulación de ácaros y polvo durante más tiempo. Los elementos como los árboles de Navidad y otras decoraciones festivas tienden a acumular mucho polvo y cuanto menos veces tengas que quitarlo, ¡mejor!
