Hay alimentos que siempre tenemos en mente cuando los bebés comienzan a comer sólidos. En mi caso fueron las compotas de papa dulce, manzana y calabaza. Jamás se me pasó por la cabeza darles un batido de mango, pero incluir opciones más "exóticas" en la dieta de tu bebé también los puede beneficiar. Te presento otros alimentos maravillosos para tu pequeñito que seguramente no te habían cruzado por la mente. Todos estas opciones son excelentes para el desarrollo de tu bebé.
Más en MamásLatinas: 12 Alimentos que toda mamá de un recién nacido necesita comer para estar saludable
¿Sabías, por ejemplo, que la papaya está cargada de vitamina C? Y, ¿quién no quiere asegurarse que su hijito tenga todos los refuerzos necesarios para fortalecer su sistema inmunológico? Los huevos son otra opción en la que muchas madres no pensamos cuando estamos planificando qué darles de comer a nuestros pequeños.
La lista a continuación incluye desde frutas y verduras hasta proteínas como la carne e incluso el pescado. Entérate por qué son importantes estos alimentos para tu bebé y comienza a buscar recetas que te ayuden a incorporarlos. ¡No te imaginas todos los beneficios que tienen estos alimentos para el desarrollo de tu pequeñito!
Los mangos y las papayas están cargados de esta importante vitamina.
Con todo lo que sufrimos las madres para evitar los resfriados de nuestros hijos, es un alivio saber que estas dos deliciosas frutas están cargadas de vitamina C. Tu bebé seguramente se las comerá porque saben bien, pero lo bueno es que tampoco son demasiado dulces.
¡Los aguacates no pueden faltar!
Ayudan al desarrollo del cerebro y del cuerpo porque contienen grasas no saturadas (es decir, que son buenas). Eso sí, ni se te ocurra ponerte muy creativa y darles guacamole cargado de picante y cilantro. Los aguacates se les deben dar solos.
¡No te olvides de los huevos!
Con mi primera hija me recomendaron evitar los huevos hasta después del año. Pero con mi segundo bebé la doctora me dio el visto bueno desde los 9 meses. Las claras están llenas de proteína y la yema ayuda al desarrollo del cerebro.
Las carnes son sumamente importantes.
El pollo, el pavo y la carne son excelentes fuentes de hierro. La idea es licuarlos y convertirlos en puré. Está de más decir que jamás se le puede dar carne sólida (así sean pequeños pedazos) a un bebé que no tiene dientes.
El yogurt es más bueno de lo que piensas.
Aunque no lo creas, el pediatra también me recomendó el yogurt porque contiene calcio, proteína y probióticos (unas bacterias que ayudan a soportar el sistema digestivo).
Las remolachas son una gran fuente de ácido fólico.
La verdad es que ni yo me las como, pero son tan ricas en ácido fólico que vale la pena intentar dárselas a tu bebé. Nunca se sabe, a lo mejor le gustan.
Incorpora un poco de mantequilla al preparar la comida de tu bebé.
La grasa saturada y el colesterol benefician el desarrollo del sistema nervioso, y por lo visto, los niños menores de 2 años no necesitan eliminar la grasa de su dieta (¡Qué envidia!). Eso sí, no le des la barra completa a tu bebé, simplemente añade un poquito a los purés para mejorar su sabor.
No te dejes llevar por el fuerte sabor del pescado.
El salmón, el atún o las sardinas son esenciales para el desarrollo del cerebro y la retina. Yo lo he probado y a mis hijos les encanta (sobre todo el salmón).