
La historia de esta pareja parece ser una en la cual el género no importa y en cambio lo que sí cuenta es el amor. No deja de ser un caso sorprendente, pero para mí es sobre todo admirable por la valentía y el coraje que supone para un ser humano, no importa su género, convertirse en alguien del sexo opuesto. Mejor aún, después de que el hombre de esta pareja decidiera transformarse en mujer, ahora estas dos personas siguen juntas y están criando al hijo varón de las dos.
Sé que para muchas de nosotras esta puede resultar otra historia rara y escandalosa. Para mí es una historia de valor. No me imagino la valentía que hay que tener para asumir una decisión de esta naturaleza y de allí mi admiración.
Esta pareja, en principio heterosexual, estaba conformada por Erin Ryan Fitzgerald y su novio, Evan Green. Después de años juntos, en 2009 decidieron tener un bebé. Sólo que mientras el cuerpo de Erin sufría las transformaciones propias de un embarazo, el de Evan sufría transformaciones irreversible. El hombre decidió convertirse en transgénero y hacer la transición para convertirse en mujer. Cuando el bebé nació, Evan no era hombre sino mujer.
Lee más en ¿Qué Más?: ¿Cómo reaccionarías si tu hijo te confiesa que es gay? | ¿Qué
Y mientras que a Erin, por esas cosas del embarazo, no le provocaba arreglarse mucho, Evan en cambio comenzó a asumir su nueva feminidad. Evan no sólo decidió conservar su nombre sino que además llevó a cabo su transformación en una forma pública, por lo que el anuncio de su nuevo sexo también expuso a Erin a la opinión de los demás…
No debió haber sido fácil para ninguna de las dos, sobre todo si se tiene en cuenta que tampoco es que hay mucho apoyo para las personas transgénero. La misma Erin dice que se siente más cómoda cuando la gente piensa que es heterosexual y que todavía tiene dificultades cuando la gente hace conjeturas sobre su sexualidad sólo porque ahora Evan es mujer.
Tal vez su capacidad para aceptar la elección de Evan no estuvo sólo enraizada en su amor, sino también en las preguntas que se hizo a sí misma al principio de la relación. Algo dentro de ella la hacía no sentiré segura de querer estar para siempre con un hombre (a pesar de que Evan, quien por entonces era hombre, era la persona más increíble que había conocido).
Ahora se preocupa por el hecho de son dos mujeres criando a un hijo varón. Nadie ha dicho que criar hijos sea cosas fácil. No lo es para parejas heterosexuaes, tampoco lo es para padre solteros. Menos para parejas de un mismo género. Hay muchos estereotipos. Muchas cosas que esperamos de los otros.
Sin embargo, me gusta que podamos hablar de género en otros términos. Me gusta que las cosas estén cambiando y que como bien lo dijo el propio presidente Obama en su segunda inauguración podams decir que todos fuimos creados igual y todos tenemos derecho a ser amados y respetados en nuestra dignidad humana, sin importar el género.
Imagen Thinkstock