¿Seré alcohólica después de mi operación para perder peso? (VIDEO)

Cuando tomé la decisión de hacerme un cirugía de desvío gástrico ('gastric bypass') a principios del 2009, pasé varios meses bastante intensos leyendo todo lo que pude sobre ese procedimiento quirúrgico para perder peso. Devoré todo libro dedicado a esa tópico, visité foros de discusión en la Internet para hablar con personas que se hicieron ese procedimiento recientemente y hasta encontré varios ejemplos de la vida real de cómo sería mi vida después de hacerme la también llamada cirugía bariátrica.

Consideré también muchas de las posibles consecuencias y efectos secundarios de dicha cirugía. Lo único que nunca consideré fue la posibilidad de desarrollar una adicción al alcohol como resultado del 'gastric bypass'.

Pero aparentemente eso es una posibilidad muy real para mí y para las muchísimas otras personas que se hacen esa cirugía para perder peso cada año. Pero ¿¡por qué?!

Los hallazgos de un nuevo estudio realizado por científicos investigadores del Centro Médico de la Universidad de Pittsburgh añaden a la "creciente evidencia" de que existe un muy real enlace entre la gente que se hizo la popular cirugía  del 'gastric bypass' y los síntomas de los desórdenes de abuso del alcohol.

Aparentemente todo se resume en dos cosas: te conviertes menos sensitivo al alcohol y, debido a eso, te arriesgas a que tu dependencia al alcohol pueda crecer. A lo que Andrew Kahn, un bebedor social convertido en alcohólico, explica que la sensación que deja el alcohol "se va tan rápido que tú puedes seguir y seguir bebiendo". Y yo tengo que decir que: definitivamente conozco exactamente a lo que él se refiere porque he sentido los efectos de emborracahrme más rápido y de ponerme sobria más rápido. De acuerdo al estudio, 1 de 10 personas que se hicieron el 'gastric bypass' desarrollaron síntomas de alcoholismo al llegar el segundo año pasada su cirugía.

¿Quieres encontrar a otras mamás como tú? ¡Sigue a MamásLatinas en Facebook!

Esas son unas probabilidades realmente aterradoras para mí. Y se hacen aún más tenebrosas por el hecho de que yo disfruto de beber ocasionalmente y definitivamente me he notado bebiendo más estos días que antes de hacerme la cirugía. Antes le atribuía esto al hecho de que físicamente me veía bien y me sentía grandiosa, y por eso quería salir afuera y divertirme más con mis amigas (ya que me aumentó la confianza en mí misma). Quizás estoy equivocada sobre esto, sin embargo. Si existe algo que definitivamente no quiero ser en esta vida es ser una alcohólica.

Ahora que sé que realmente tengo un riesgo real de desarrollar alcoholismo, debido a la misma cirugía que me ayudó a salvar mi vida (y mi salud), creo que necesito seriamente reducir mi consumo. Es como Andrew dice, "si se me hubiera dado la oportunidad de escoger entre ser obeso y convertirme en alcohólico, yo hubiese pensado [mi decisión] más." Yo definitivamente ahora estaré pensando sobre eso MUCHÍSIMO.

¿Has conocido a alguien que desarrolló alcoholismo después de una cirugía para perder peso? ¿Qué harías si estuvieras en esta situación? ¡Comparte tu opinión en el área de comentarios abajo!

Imagen vía Thinkstock