
Tras el huracán Sandy, miles de personas siguen sin electricidad en la costa Este de los Estados Unidos. Debo decir, que soy una de las personas que se vio afectadas por este fenómeno y desde el lunes por la noche, estoy sin electricidad (ahora escribo desde la casa de una amiga). Lo peor del caso, es que las noticias, no parecen ser muy alentadoras, pues se prevé que muchos sigan sin luz hasta una semana más. Y ante tan frustrante situación, no nos queda más que intentar seguir con nuestra rutina, tomando ciertas precauciones en casa, para que las secuelas no sean mayores, pues existen riesgos mortales en los hogares que se quedan sin electricidad, como señala un informe del HuffPost Voces.
Y es que, según la U.S. Consumer Product Safety Commission (CPSC), la Federal Emergency Management Agency (FEMA) y la U.S. Fire Administration (USFA), cuando se interrumpe el servicio eléctrico, existe el riesgo de envenenamiento por monóxido de carbono (debido a los generadores portátiles), de incendio por velas encendidas o de choque eléctrico debido a cables caídos.
Una de las principales preocupaciones de dichos organismos, es que, debido a que muchas personas buscan la forma de mantener su casa caliente –ante la ausencia de calefacción- o de poder cocinar y mantener los alimentos refrigerados; recurren a generadores portátiles que, si se usan en la casa, pueden emitir un alto nivel de monóxido de carbono, incluso mayor al que generan varios automóviles con el motor encendido, lo que puede incapacitar y acabar con la vida de las personas.
De ahí, que recomienden, que los generadores, nunca se utilicen dentro del hogar, en un sótano o en un garaje, sino que se coloquen afuera de la casa, lejos de las ventanas, puertas y conductos de ventilación. Además se aconseja, no usar parrillas de carbón y estufas portátiles en interiores, ya que producen niveles letales de monóxido de carbono.
Asimismo, es importante mantenerse lejos de cualquier cable caído, ya que pueden tener un voltaje mortal. Tampoco se deben encender los componentes eléctricos que hayan estado bajo y el agua, hasta que sean revisados por un electricista. Y por último, se recomienda, utilizar linternas, en lugar de velas para evitar un incendio. No obstante, si no tienes otra alternativa, las autoridades aconsejan mantener las velas alejadas de cualquier objeto que se pueda incendiar rápidamente y vigilarlas constantemente.
Espero que sigas al pie de la letra estos consejos, pues aunque lo peor ya haya pasado, nunca está de más ser precavida y poner atención, a cualquier recomendación que pueda alejarnos de vivir una tragedia ¡Mantente a salvo a ti y a tu familia!
Imagen vía abisdale/flickr