Cuando un bebé nace requiere seguridad y confianza. No olvidemos que pasó nueve meses dentro de la barriguita de mamá, por lo que al estar por primera vez en contacto con ruidos, cambios de temperatura, luces y voces, podría sentirse confundido y desorientado. Aunque la naturaleza ha dotado a los bebés de todas las capacidades para adaptarse, pasar de la calidez del vientre al mundo externo, no deja de ser impactante para él. Sin embargo, siempre existirá una solución mágica llamada abrazo y aquí te ennumeramos los motivos por los que es importante hacerlo.
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El vínculo afectivo que se crea cuando tu bebé nace, es un regalo para toda su vida ya que fomenta su salud física, mental y emocional. Además lo capacita para sentirse seguro ante el mundo que lo rodea. El amor es la clave de todo y una de las muestras más importantes es el abrazo que significa protección. Además le dará muchos beneficios a corto y largo plazo en su vida, así que si tu bebé es recién nacido, te invitamos a que sigas leyendo ya que esto seguro te va a interesar.
Ahora puedes escuchar el contenido de MamásLatinas donde quiera que estés, a través de nuestro podcast Mamá Dice. Cada episodio contiene tips prácticos enfocados en la crianza positiva y saludable. Escúchanos en tu plataforma de podcast favorita.
Es tan importante que inspiró el método canguro para prematuros.
Los orígenes de este método son de Bogotá, Colombia, donde por primera vez se descubrió que el contacto piel con piel de la madre y el bebé es una alternativa a la incubadora. Es así como el contacto del abrazo se convirtió en una práctica que se ha extendido al mundo y que ayuda al bebé a sentirse en un entorno cálido parecido al del útero materno, sumado a las caricias que mamá y papá le brindan con amor.
El abrazo ayuda a controlar la temperatura del bebé.
A pesar de que la naturaleza ha dotado a los bebés de todas las capacidades para adaptarse fuera del vientre de mamá, aún tienen ciertos procesos del organismo con niveles de inmadurez que se irán perfeccionando durante su desarrollo. Esto significa que su supervivencia depende de la sabiduría del organismo y también de los cuidados que reciba del entorno, principalmente de sus figuras más importantes como mamá y papá, quienes al abrazarlo lo ayudan al proceso de regulación en la temperatura corporal.
Un abrazo suave lo protege y lo guarece del entorno incómodo.
Para un bebé recién nacido los estímulos del medioambiente en el que ha nacido le resultan desconocidos e incluso agresivos. Ante entorno que puede percibir como hostil al estar en contacto con la luz, el ruido o los cambios bruscos de temperatura, se puede estresar porque es algo nuevo y desconocido para él. Es posible que detone sus mecanismos de supervivencia, por lo tanto comience a generar cortisol que es la hormona del estrés.
Un abrazo cálido protege su cabecita y su cerebro.
Quienes han cargado a un bebé recién nacido sabrán que la fragilidad del bebé es mayúscula al no controlar ninguno de sus músculos y su cabecita va de un lado a otro sin ningún tipo de firmeza. Por ello, muchas personas sienten temor de sostenerlos por miedo a lastimarlos. Sin embargo, cuando el bebé recibe un abrazo sobre el pecho descubierto de mamá o papá, quienes al mismo tiempo sostienen su cabecita de forma vertical, logra sentir la seguridad que necesita a través de un sostenimiento confiable y amoroso. Este tipo de abrazo amortigua la cabecita y el cerebro.
Los abrazos llenos de amor funcionan, aunque no provengan de mamá.
Cuando mamá tuvo un trabajo de parto agotador, cuando apenas está regresando de la anestesia o cuando tiene complicaciones de salud debido al nacimiento de su bebé, es importante que descanse y recupere energía para tener las condiciones necesarias que requiere para el cuidado de su bebé. En estos momentos donde mamá está agotada es cuando papá, los abuelos, los tíos o los seres queridos pueden apoyar a mamá con el bebé. Pueden sustituir el abrazo piel con piel y generar confianza en el pequeñito, ya que el amor que predomina es el factor que importa y por lo tanto el bebé sentirá seguridad también aunque no sea mamá quien esté.
Los abrazos generan oxitocina que es la hormona del vínculo.
Los neuropediatras dicen que el cerebro del bebé necesita 12 abrazos al día. Esto es porque en las investigaciones más recientes se ha descubierto que el abrazo llega directamente al cerebro y libera las hormonas del bienestar que ayudan a aliviar el estrés y brindan seguridad, ya que amplían la confianza en los demás. Por otro lado, esta segregación de hormonas como la oxitocina, fortalece los lazos y el vínculo sano con los cuidadores principales. Como verás, es una forma adecuada de empezar el trayecto a su salud mental.
El abrazo activa los receptores de la piel del bebé.
Esto puede aportar sensación de calma y serenidad al bebé. Incluso, nuevas investigaciones de la universidad de Bar-llan de Israel, aportan datos sobre el hecho de lo que ocurre como un nivel muy elevado de conexión que se genera entre el bebé y la madre cuando se abrazan, ya que descubrieron que los abrazos cálidos y corazón a corazón sincronizan sus latidos cardiacos de manera que el ritmo se unifica entre ambos.
Cuando abrazas a tu bebé fortaleces su sistema inmunológico.
El sistema inmune del recién nacido es aún inmaduro ya que sus órganos no están totalmente organizados y las células que atacan a los microorganismos patógenos aún no están capacitadas en su totalidad para proteger de infecciones virales o bacterianas al bebé. Sin embargo, cuando mamá o papá tienden a estar en contacto continuo a través del abrazo que le dan, aumentan la capacidad de protección del sistema inmune del pequeño y lo ayudan a madurar más pronto.
Fortaleces sus futura capacidad de aprendizaje.
Cuando abrazas a tu bebé lo estimulas a través del sentido el tacto y al mismo tiempo su cerebro se desarrolla adecuadamente. Esto ayuda a que sus capacidades cognitivas refuercen las habilidades que requerirá para tener un buen rendimiento académico en la escuela. Algunas investigaciones hechas en los años sesenta por el científico René Spitz en orfanatos concluyeron que los bebés que no reciben afecto a través del contacto físico como el abrazo, tienden a desarrollar marasmo y su desarrollo cerebral era muy disminuido.
Tus abrazos los ayudan a crecer adecuadamente.
Cuando tu bebé recién nacido es bien recibido en el mundo y le transmites el cariño y amor dándole una bienvenida con un abrazo de protección y seguridad, su organismo responde de formas favorables. Si mantienes este contacto físico a lo largo de su desarrollo, crecerá adecuadamente en peso y estatura. Como te lo comenté en puntos anteriores, las hormonas que se segregan son muy importantes ya que en este caso es nuevamente la oxitocina la responsable de favorecer el crecimiento.
Un bebé abrazado aprende a abrazar a otros.
Es un efecto en cadena que fomenta el establecimiento de lazos afectivos y por lo tanto favorece el futuro contacto social. Los bebés aprenden por imitación, sin embargo, esa imitación a la larga estimula el lazo genuino en la repetición de las muestras de afecto que ayudan al desarrollo de la empatía e invitan a la sana convivencia. El amor es un factor fundamental para crear un mundo mejor en el que nuestros hijos puedan crecer y el comienzo del camino es el contacto desde el abrazo.
El abrazo sintónico es sano, el abrazo obligado no.
Es una norma muy importante a tener en cuenta ya que muchas mamás y papás en su intención de ser buenos padres y madres, siguen al pie de la letra las indicaciones y recomendaciones de los pediatras, neuropediatras y psicólogos infantiles, sin tomar en cuenta que a veces los bebés tienen sus propios ritmos de acercamiento y saturarlos de abrazos también sería un error. Podrían sentirse invadidos y hasta simbólicamente asfixiados en su espacio. Es importante conectarte con tu bebé para que te sincronices con él y con sus propias necesidades, no hagas esto como un mero ejercicio instructivo porque no funciona así.
Los abrazos conectores te ayudan a comunicarte con tu bebé.
Para muchas madres y padres la etapa preverbal es complicada debido a que los bebés recién nacidos no cuentan con un lenguaje desarrollado que les permita expresar sus necesidades. Sin embargo, la forma que todo bebé tiene para comunicarse es a través del llanto. Si tú o papá logran un adecuado vínculo a través de los abrazos a su bebé, podrán desarrollar la capacidad de descifrar el código de comunicación del bebé, ya que el nivel de conexión los ayudará a estar en sincronía y comprender qué necesita cuando llora.
Reduce estrés en bebés con Síndrome de Abstinencia Neonatal
Según el Instituto Nacional sobre el Abuso de Drogas, cada veinticinco minutos nace un bebé con Síndrome de Abstinencia Neonatal en Estados Unidos. Estas criaturas son vulnerables y nacieron en medio de las adicciones de su madre, por lo que sufren el síndrome de abstinencia y sienten mucha ansiedad. Se ha comprobado que el abrazo de voluntarios para distintos programas que promueven la protección del recién nacido ayuda a calmar y a tranquilizar al bebé que pasa por este proceso de desintoxicación.
El abrazo facilita la lactancia materna.
Recordemos que la hormona estrella en todos los beneficios que aporta el abrazo es la oxitocina. Sin esta hormona no es posible la producción de leche. Cuando el contacto piel con piel crece y los abrazos se incrementan, también hay más producción de leche. Los bebés que están siendo amamantados tienden a conectar su mirada con la de mamá. Es una clara manifestación del vínculo que ayuda a que se sientan nutridos tanto física como emocionalmente.
Karina Suárez Fernández es Psicóloga clínica, psicoterapeuta y mamá de dos adolescentes.
Escucha por qué es importante que abraces a tu recién nacido cada día en nuestro podcast.
Mamá Dice es el podcast de consejitos de maternidad de MamásLatinas. Escúchanos de lunes a viernes en tu plataforma de podcasts favorita. Son cortos y se adaptan al estilo de vida de cualquier mamá.