No hay semana que Kim Kardashian no sea noticia por alguna publicación en redes sociales. Kim ha decidido arrebatar el trono de rey de Instagram a CristianoRonaldo, y para ello está subiendo la temperatura de sus publicaciones en busca desesperada de aumentar la interacción con sus fans. Pero parece que quizás en ese esfuerzo desmedido se haya dejado llevar y haya llegado a traspasar una línea delicada al involucrar en su objetivo a su hijita de cuatro años, North West.
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Kim Kardashian publicó una foto en la que se le ve de espaldas con el sosten desabrochado, y mirándose en un espejo. Hasta ahí nada raro en la vida de está estrella del papel couché. El problema es que como se puede apreciar en la imagen, y como ella misma escribió en la publicación, la foto la tomó North West, que a sus cuatro años podría estar haciendo mejores cosas que ayudar a mostrar las carnes de su madre por todo internet. Las reacciones, por supuesto, no se han hecho esperar.
Sin ningún tipo de pudor, Kim Kardashian publicó esta foto sacada por su hijita North West.
Kim Kardashian no tiene miedo a mostrarse al gran público. Lo ha hecho una y mil veces y lo seguirá haciendo. Es lo qué mejor sabe hacer y el motivo por el cual es famosa, y seguramente continuará en ello mientras siga teniendo un cuerpo de infarto. Pero de ahí a utilizar a su hija de fotografa, hay un largo trecho. Ella pensó que sería algo bonito y que sus fans le reirían la gracia, pero las reacciones han ido más bien en el sentido contrario.
Las reacciones de sus fans hablan por sí solas, mientras su padre no se pronuncia.
Que Kim Kardashian tiene una forma de ser especial, lo sabemos de sobra. Le gusta llamar la atención con todo lo que hace y sus fans normalmente la apoyan. Sin embargo en esta ocasión, muchos no han dudado en criticarle. "Qué clase de madre y mujer hace esto con su hija", comentó una fan. Mientras que otra le respondió: "Yo no veo a ninguna mujer en esta foto", acompañando el comentario con el emoticono de la carcajada. Mientras tanto Kanye West, padre de la criatura, no se ha pronunciado al respecto.
La pequeña North West está creciendo en un ambiente de lo más extravagante.
Son pocas las imágenes de North West en situaciones típicas de un bebé de su edad. La pequeña se ha convertido rápidamente en un ícono de moda, empujada obviamente por su madre. Cosas de las que una niña de cuatro años no debería preocuparse, son el día a día de North: qué zapatos van a juego con su ropa, qué bolso es el más adecuado para cierta ocasión, qué abrigo de piel es el más apropiado y un sinfin de etcéteras que pondrían los pelos de punta a cualquier madre o padre, pero que pueden llegar a ser entendibles. Sin embargo, publicar una foto que te ha sacado tu hija semidesnuda, es pasarse de la raya.
North West ya demuestra una personalidad parecida a la de su madre y sus tías.
Con sólo cuatro años, a North West no se le da mal el papel de socialité que ha heredado de sus familia materna. En más de una ocasión ha demostrado sus malas pulgas con los paparazzi, como el día que les gritaba "no pictures!" a todo pulmón.
Kim debe darse cuenta de que su hija debe crecer como una niña normal, sin las obsesiones de imagen de sus padres.
No le hace ningún favor Kim a North haciéndole que le saque fotos para Instagram ni enseñandole qué ropa es la mejor para cada ocasión. La pequeña tiene solo cuatro años y debe crecer jugando y disfrutando, como cuando con su prima Penelope se divertían impersonando a sus tías Kendall y Kylie.