Cuando tu bebé llora sin parar es normal que te sientas desesperada y puede que muchos te sugieran que lo dejes llorar. Pero, algunas investigaciones médicas apuntan a que no es la mejor opción para su salud neurológica, mental y emocional.
Más en MamásLatinas: 9 tips para calmar a tu bebé cuando está irritable
Del mismo modo en que te desesperas porque no sabes qué está tratando de decir tu bebé con su llanto, él experimenta lo mismo intentando comunicar a qué se debe su queja. En las investigaciones médicas se demostró que la liberación de algunas hormonas al momento del llanto pueden afectar seriamente la memoria del bebé a largo plazo.
Afortunadamente, si tienes la información correcta, puedes evitar daños futuros. De esta forma garantizas el bienestar de tu bebé. Te invito a que prestes atención a estos nueve motivos por los que jamás debes dejar que tu bebé llore sin parar.
Aumenta su nivel de estrés al no sentir satisfecha la necesidad que intenta comunicarte con el llanto.
Puede que tenga hambre, que le duela algo (la etapa de los cólicos) o que sólo quiera sentirte cerca a través de tu calor o del latido de tu corazón. Si no es atendido, puede producir grandes cantidades de hormona del estrés.
La hormona del estrés conocida como cortisol es sumamente neurotóxica.
Las investigaciones apuntan a que puede dañar sus neuronas, principalmente el área del cerebro relacionada con la memoria, sobre todo cuando el organismo del bebé se ve sometido a estrés continuo.
Se siente en un mundo desconocido y por lo tanto vulnerable y en constante peligro si no atiendes a su llamado.
Necesita sentir tu protección porque durante mucho tiempo estuvo en la calidez de tu vientre y el encuentro con el mundo y las formas de comunicarse son nuevas para él. Siente desconfianza y tú le puedes brindar con tu cobijo y tu piel el soporte que necesita cuando llora.
Porque no desarrollas la capacidad necesaria para descifrar el significado de su llanto y el vínculo no se crea.
Todas las que hemos sido mamás sentimos que esta etapa será eterna y puedes sentirte presa de la impaciencia y la irritabilidad. Sin embargo es una etapa transitoria donde es importantisimo sentir emocionalmente a tu bebé para ver resultados en su salud futura.
Las deficiencias neurológicas pueden provocar problemas futuros de adaptación social y dificultades de aprendizaje.
Las consecuencias a largo plazo pueden verse reflejadas en situaciones de integración en su medio ambiente incluyendo la socialización y el desarrollo cognitivo. Todas estas habilidades pueden verse frenadas.
El rol de madre se desarrolla con la empatía y eres tú quien necesita adaptarse al bebé y no al revés.
El estar cerca de tu bebé en los momentos donde necesita tu atención, le ayudará a conectarse contigo de una forma diferente y se sentirá mucho más confiado en el mundo sabiendo que entiendes lo que te quiere comunicar.
Puede convertirse en un bebé o un niño sumamente exigente que piensa que debe gritar para ser atendido.
Contrario a lo que popularmente se piensa, dejarlo llorar no es algo que incremente su autonomía. Al contrario, aprende que necesita demandar atención de forma extrema para ser realmente tomado en cuenta.
Los bebés necesitan sentir que están totalmente resguardados emocionalmente por mamá o papa.
Sus habilidades son escasas ya que nacen inmaduros en todos sus aparatos y sistemas. Dependen totalmente de ti y es por eso que pueden sentirse en riesgo continuo. Sentir que eres su guarida, sentir tus abrazos y sentir tu atención “genuina” disminuye notablemente su estrés.
Porque notarás que si identificas lo que necesita, llorará mucho menos conforme pase el tiempo.
Si lo ignoras, la frecuencia y la intensidad del llanto pueden crecer. Si lo atiendes y estableces una verdadera conexión con la intención de sentir lo que necesita, tu bebé se sentirá seguro y el llanto desaparecerá.