Perforarle las orejas a las bebitas apenas nacen es una tradición de las familias latinas, pero en los Estados Unidos la práctica no es muy común. La Academia Americana de Pediatría recomienda abrir los orificios cuando las niñas estén grandes. Hay ciertas cosas que debes saber antes de comprar los aretes.
Lee más en ¿Qué más?: 10 Trajes de bautismo que te van a derretir
Imagen vía Thinkstock
Consulta a tu pediatra
Si quieres que el médico de tu bebé le abra los agujeros en las orejas a tu recién nacida, debes hablarlo con anticipación porque la mayoría no tienen las herramientas disponibles.
Aretes de oro únicamente
Cómprale a tu princesa aretes de oro de al menos 14 kilates para reducir el riesgo de infección ya que muchas niñas están naciendo alérgicas al níquel.
Y que sean hipoalergénicos
Venden aretes de este tipo especiales para recién nacidas y los deberías comprar para disminuir el riesgo de infección.
Esteriliza los aretes antes de ponerlos
Aunque suene obvio, la mayoría de las bebitas sufren infecciones con los aretes porque al profesional se le olvidó esterilizarlos con alcohol antes de ponerlos.
Aplica anestesia tópica
Si no quieres que tu bebita sienta dolor al perforarle las orejitas, puedes pedirle al médico que le ponga un poco de anestesia tópica en el área.
Nada de presión en las orejas
Al ponerle los aretes se hizo una herida y es molestosa para tu bebita. Limita la presión y la fricción del área al menos por 72 horas después de poner los aretes.
Limpia con antibióticos
Dile al pediatra que te recomiende un antibiótico tópico para que apliques en los agujeros después de limpiar con alcohol para evitar que se infecten.
Busca señales de infección
Si los agujeros están rojos, se sienten pegajosos y huelen a queso fermentado, debes remover los arete inmediatamente y aplicar alcohol. Si tu bebita presenta fiebre, ve al pediatra.
No remuevas los aretes por 6 semanas
Para que los agujeros queden completamente abiertos y no se cierren, no los remuevas por seis semanas después de ponerlos.
Nada de argollas
Después de la seis semanas puedes comprar los aretes que quiera pero asegúrate que sean topos y no argollas para que tu bebita no se los arranque sin querer y terminé hiriéndose.
