Una tarde, Dieguito me contó una historia sobre un niño que metió al microondas el pequeño hámster de su hermano. Y, muy triste me preguntó: "¿Por qué hizo eso, mami?" Jugar a matar no es un juego; son señales de alarma de falta de compasión y bondad. Aquí te paso unos tips para que logres que tus hijos tengan un buen corazón.
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Imagen vía Corbis
Usa a los superhéroes
Pregúntale a tu hijo(a): Si fueras un superheroe, ¿qué harías por el mundo? Así, comenzará a interesarse en el sufrimiento del otro, y desarrollará empatía. Cuando necesites que ponga en práctica la compasión, pregúntale: ¿Qué haría tu superhéroe en este caso?
Un paseo por la estación de bomberos
Permite que charle con un bombero. Pregunten lo que siente cuando rescata a alguien. Sería interesante para tu niño(a) escuchar una historia real y descrita a detalle de lo importante que es trabajar ayudando a otros.
Inventen un cuento
Usen la imaginación para crear un cuento. Funciona mejor hacerlo con títeres, dibujitos o muñecos. En ocasiones, pon el título y el(ella) puede inventar la historia, y después intercambien. Dile algo como: Esta vez te toca crear la historia, y quiero que se llame El pequeño que siempre dice por favor.
Usa las pelis infantiles
Hazle preguntas sobre lo que piensa acerca del villano de la película, por ejemplo: ¿Te parece que lo que hizo el villano fue lo adecuado?; ¿qué hubieras hecho tú en su lugar?; ¿cómo te sentiste cuando el villano fue tan malvado? Después, hazle saber lo que tú harías para ser bondadosa en la historia.
Un acto de bondad al día
Dale una lista escrita con 10 actos de bondad, y pídele que elija uno de ellos para practicar durante la semana. Que tu hijo(a) sea quien lo seleccione, para evitar un acto forzado. Puedes incluir acciones como separar ropa para donarla a una institución, darle de beber a los perritos del parque, entre otras que puedan ser un buen ejemplo.
Caricaturiza el 'por favor' y el 'gracias'
Que dibuje en una hoja un muñeco que represente la palabra "por favor" y otra para "gracias". Cuando necesites que mencione "las palabras mágicas", solo muéstrale los dibujos para que se vaya familiarizando y tome cariño genuino en sus muñecos. Así, las pronunciará con verdadero sentimiento, más que por obligación.
Preparar algo con sus propias manos
Si su hermano(a) o algún amiguito del colegio se enferma, pregúntale qué le gustaría preparar para alegrarle el día. Puede ser un té, o quizá cocinar algo y llevárselo a la cama.
Fomenta la bondad con el planeta
Enséñale a separar la basura inorgánica y la orgánica, haz hincapié en que no desperdicie agua, y muéstrale en imágenes los posibles efectos negativos de la contaminación.
Juega a 'Imagina que…'
A través de la fantasía, llévalo a asociar un sentimiento neutro con un sentimiento personal. Puedes hacerlo de esta forma, diciéndole algo como: Si ese perrito, que vez ahí con frío, fuera nuestro perrito Lucky, ¿qué harías? Así poco a poco ampliará el amor que siente de lo particular a lo universal. Esto lo hago con mis hijos, y funciona a la perfección.
Sácalo(a) de la burbuja rosa
Llévalo(a) más allá de su círculo cercano de amigos, pues solo comprenderá que hay un mundo diferente si lo acercas a él. Visiten horfanatos o asilos, y guíalo a la convivencia y la ayuda, para que detecte otro tipo de necesidades y no solo las que él(ella) conoce.
Enséñale a compartir
Haz hincapié en la felicidad que tienen quienes juegan con sus juguetes, gracias a que él(ella) se los prestó. Valida su participación en la alegría de todos, y dile: *"*Gracias a que estás compartiendo tu juguete, todos pasaron del aburrimiento a la felicidad".
