Fui una niña miope, heredé la miopía de mi papá y por eso presto mucha atención a la salud visual de mis hijos. Con el regreso a clases y las horas que pasan mirando pantallas (de tabletas, tv, computadoras y teléfonos), le pregunté a los doctores Danny H. Ngo, jefe de optometría de Kaiser Permanente y Michelle Muñoz, oftalmóloga pediátrica de ese centro en el Sur de California, ¿cómo saber si un niño necesita lentes?
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Imagen vía Corbis
¿Qué tan temprano pueden aparecer los problemas de la vista?
Desde que son pequeñitos, hay problemas como el estrabismo, que se pueden detectar. Los primeros chequeos visuales deben hacerse al mes de nacido, luego a los siete meses, al año y medio, y a los 4 años. Una vez que comiencen a ir a la escuela, los chequeos deben hacerse cada dos años.
¿Por qué hay que hacer tantas revisiones durante los primeros 4-5 años?
Porque a los 5 años es cuando los niños alcanzan 100% de su agudeza visual. Y cualquier problema que no se haya detectado a tiempo podría resultar en problemas agudos de la visión que tendrían un efecto a largo plazo.
¿Cómo se si mi niño tiene un problema visual?
Si se queja de visión borrosa o dolores de cabeza luego de enfocar su visión por largo tiempo, puede ser una señal. También si uno de los ojos tiende a desviarse hacia dentro o hacia afuera, en especial cuando está cansado o cuando no está enfocando la visión en algún objeto, como por ejemplo al ver una fotografía o ilustración.
¿Qué otras señales son indicador de que mi hijo necesita lentes?
Si se acercan mucho a la televisión, tableta, computadora o libro, podría ser que necesite lentes. Otras señales incluyen: parpadear mucho, que haga bizcos, o que se restriegue los ojos a menudo. Si tiene problemas al leer y escribir presta atención si notas que tu hijo se cubre un ojo cuando lee. También está pendiente si tu hijo se rehúsa a leer.
¿Qué hago si creo que mi hijo tiene problemas de la vista?
Es importante llevarlos al oftalmólogo, para que le hagan las revisiones de visión adecuados. Una visita al pediatra te ayudará a detectar su estado de salud general, pero si sospechas que tiene un problema visual, es importante que visites al oftalmólogo.
¿Qué hago si mi hijo no se quiere poner los lentes?
Es normal que se muestren un poco reacios, en especial si son pequeños. La importancia de los lentes es que los ayudarán a ver mejor, y tu meta es ofrecerles oportunidades para ayudarlos a que se den cuenta de esto. Al principio, colócale los anteojos por periodos cortos, aumentando gradualmente el tiempo de uso para que tu hijo los tolere y se acostumbre.
¿Cómo lo enseño a que cuide los lentes?
Es importante que desde un principio lo acostumbres a que sólo un adulto debe ponerle y quitarle los lentes. A medida que crezcan, llegará un momento en el cual ellos tendrán la suficiente madurez para hacerlo por sí mismos. Es importante que le enseñes que los lentes no son un juguete.
¿Qué tipo de montura y cristales son los más recomendables?
Cuando vayas al oftalmólogo o a un centro optometrista, pídeles que te ayuden a identificar la montura ideal para tu hijo. Opta por las que sean cómodas y que se ajusten a su cabecita. Considera utilizar una banda para la cabeza, que ayudará a distribuir el peso de los lentes. Asegúrate que la montura de los lentes no le apriete la nariz, ni las orejas.
¿A qué edad puede un niño usar lentes de contacto?
A partir de los 8 años, cuando pueden aprender como manipularlos y cuidarlos. Pero dependerá de cuan responsable y cuidadoso sea el niño. Tu oftalmólogo te hará una serie de preguntas que te ayudarán a determinar si tu hijo está listo para utilizarlos.
¿Algún tipo de lente de contacto especial para niños?
Si va a usarlos, es preferible optar por los desechables.
