Sé que parece algo descabellado o cuando menos irresponsable, pero desde el 2010, 140 criaturas, incluyendo bebés de meses, han muerto sofocados luego de que, en un descuido, sus papás o mamás los dejan olvidados en sus autos en pleno verano. Por fortuna, los fabricantes de asientos para bebé han creado un dispositivo que bien podría salvarlos de esa horrenda muerte.
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El promedio anual de niños que muere como consecuencia de la hipertermia es de 37. La hipertermia o sobrecalentamiento ocurre cuando la temperatura de su cuerpecito sobrepasa los 104° Fahrenheit incluso cuando afuera la temperatura no sobrepasa los 74°F.
Y eso puede ocurrir en un simple descuido: el bebé se queda dormido, no emite ningún sonido, la mamá o papá que por lo general está trasnochado (por el mismo bebé), se olvida de que está en el auto, y ocurre lo peor. Los papás y mamás de las víctimas se enfrentan luego a cargos criminales (homicidio por lo general). Total que todo es una fatalidad.
Por eso me encantó la idea de que Evenflo haya diseñado un asiento para bebés con un dispositivo cuyo objetivo es prevenir este tipo de accidentes. Se trata de un sensor que emite una señal sonora que le avisa a los padres cuando apagan el auto y el cinturón de seguridad del bebé lo sigue sujetando.
Creo que este es un gran invento y que cualquier cosa que contribuya en la seguridad y bienestar de los más pequeños de la casa es más que bienvenida. Los asientos con este dispositivo están a la venta en Walmart y cuestan $149.
Imagen vía Corbis
