Las 10 cosas que debes saber antes de dejar de lactar a tu bebé

Al igual que cualquier mamá primeriza, cuando comencé a amamantar a mi primer hijo, andaba toda enredada. Cuando llegó el segundo, ya era toda una experta y lo cierto es que ese bebé, quien hoy ya tiene 11 años, disfrutó de lo que los médicos llaman "lactancia materna exclusiva" hasta los 8 meses y vino a probar el agua cuando tenía unos 4 meses. Por ese entonces, yo vivía en la gloria sólo de saber que no tenía que lavar ni esterilizar teteros ni gastar dinero en las fórmulas de leche para bebés. Como trabajaba al igual que ahora desde mi casa, andaba con mi muchachito a cuestas y recuerdo esa época como de las más felices de mi vida. Sigue leyendo y te cuento cómo fue el destete.

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No sé hasta cuando pensaba yo que iba a darle pecho a mi bebé, pero lo cierto es que una vez fuimos a ver al pediatra y me dijo que ya era hora del destete. Y no me lo dijo por mi bebé, sino por mí. Recuerdo que me dijo, "Tú estás cansada, demacrada y muy delgada". Como soy de las que no le discuto al médico y además de verdad estaba feliz pero agotada, procedí a "despegarme" a mi muchachito sin mayores complicaciones, en un proceso que duró aproximadamente una semana, al cabo de la cual mi hijo tomaba tetero como si nada.

No me sentí culpable, ni lloré, ni nada. Sin embargo, entiendo que no todo el mundo experimenta el destete de la misma manera. Si estás en ese proceso o planeas estarlo dentro de poco, ten en cuenta lo siguiente:

1. Antes de dejar de lactar a tu bebé, evalúa los pros y los contras.

2. No existe una edad para el destete. Tú decides cuándo es el mejor momento para ti y para tu hijo.

3. El destete es un proceso natural, por el cual no te tienes que sentir culpable.

4. Amamantar se rige por la ley de oferta y demanda; cuando empieces a dar menos pecho, menos leche producirás.

5. Una buena forma de comenzar el destete es por las noches, así podrás dormir un poco más.

6. Si tu bebé te pide pecho en este proceso, no se lo niegues para que no se sienta rechazado.

7. Si tu bebé no te pide que le des pecho, no se lo ofrezcas y cuando le toque la hora de comer, dale su biberón u otro alimento.

8. Consulta con el pediatra cuáles son las mejores fórmulas para tu bebé.

9. El destete implica un cambio en la vida de tu hijo. Asegúrate de no hacerlo cuando introduzcas otros cambios (comienza la guardería, lo estás entrenando para ir al baño, te estás mudando, vas a regresar al trabajo, etc.).

10. Ten mucha paciencia contigo y también con tu bebé. Recuerda que el destete es un proceso.

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