Cualquier cosa que haga sufrir a nuestro bebé, nos hace sufrir a nosotras. Y el estreñimiento puede convertirse en un verdadero sufrimiento para nuestros pequeños.
Algunos factores lo propician, y lo convierten en motivo de llanto desesperado a la hora de las deposiciones. Aquí te daré unos importantes consejos para librar a tu bebito de este padecimiento.
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Desde el nacimiento hasta los 3 años, el estreñimiento es un problema bastante frecuente, según publica BBCMundo. Se considera que el niño lo padece, cuando hay menos de tres deposiciones a la semana y el acto de defecar se convierte en algo doloroso para el infante. Entre los factores que lo causan, podemos mencionar:
–Cambios en los patrones de la dieta. Por ejemplo, cuando se pasa de la leche materna a la de fórmula.
-Retención prolongada por parte del niño, que se aguanta, cuando pasar a la taza del baño le causa estrés.
-Una dieta carente de agua y fibra.
A continuación seis tips para prevenirlo:
1. Si es menor de 6 meses, trata de alimentarlo exclusivamente con leche materna. Y dale masajes en su pancita, 3 ó 4 veces al día. Con movimientos en forma de círculos.
2. A partir de los 6 meses, aumenta los alimentos ricos en fibra como cereales, frutas y verduras. Puedes darle jugo de ciruelas pasas, es muy efectivo para regularizar la función intestinal.
3. A partir del primer año: Asegúrate que tome un mínimo de 9 onzas de agua al día.
4. Prepárale papillas con alimentos ricos en fibra tales como: Auyama, papas y maíz, y frijoles.
5. Agrega una cucharada de aceite comestible a sus papillas. Y consulta con su pediatra sobre cuáles otros alimentos son convenientes y altos en fibra para tu hijo.
6. Evita el uso del supositorio, lo ideal es seguir las recomendaciones de arriba, para no llegar a esto, que siempre es doloroso para el niño.
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