Nadie como una mamá latina para intuir cuando algo está mal con los hijos y hacer todo lo que sea necesario para solucionar la situación. Los nombres en esta historia fueron preservados en secreto, para respetar la privacidad del niño involucrado, pero el heroísmo de la madre fue tal, que la policía decidió difundir los hechos, para inspirar a otras mujeres que sienten que algo anda raro con los niños.
Cuando te cuente lo que hizo esta intrépida madre para capturar a las maestras con las manos en la masa te va a sorprender. Lo mejor es que las maestras, que eran de una escuela pública, han sido suspendidas por maltrato.
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La mamá explicó a la policía que su hijo de tres años comenzó a cambiar su comportamiento, después de varios días en esa escuela. "No quería ir, se puso más llorón, comenzó a pegarle a otros niños. Mucho más violento y agresivo. Él no era así", relató. Como buena mamá sospechó que alguien le había hecho algo.
El niño se negaba a responder preguntas sobre la escuela y ahí su mamá tuvo la primera pista. Habló con otras madres y se dio cuenta de que había ya sospechas contra las maestras. Como una leona dispuesta a hacer todo lo necesario para proteger a su cachorro, esta mujer, que vive en la ciudad brasileña de Espíritu Santo, se puso como una espía.
Agarró la mochila del bebé y en el bolsillo le creó un sistema para poner el teléfono celular. Con goma caliente de silicona pegó una funda plástica para celulares dentro del bolsillo. La cámara del teléfono quedaba justo en el ojo del súper héroe. La puso a grabar y así quedó registrado como la bruta maestra les gritaba y hasta sacudía a los chiquitos.
Las maestras están ahora bajo una investigación policial y podrían hasta ser condenadas a dos años de cárcel. Las leyes en Brasil son duras en estos casos. ¡Bien hecho!
La verdad es que a mí jamás se me habría ocurrido y me parece que todas deberíamos aprender de ella. La intuición de mamá nunca falla y hay que escucharla siempre.
Imágenes vía Thinkstock, TV Gazeta
