Da a luz en mortal tormenta de nieve ayudada por un ángel

Creo en los ángeles. En los ángeles que tenemos a nuestro alrededor: esas personas que no lo piensan dos veces en ayudar a quienes lo necesitan. A veces dos o más ángeles se encuentran y lo que sucede es magia. Eso fue lo que pasó en Buffalo, una ciudad neoyorquina fronteriza con Canadá, durante la peor tormenta de nieve en dos décadas, que ya ha dejado cinco muertos e innumerables lesionados.

La magia fue el nacimiento de un bebé en plena tormenta. Los ángeles son Bethany Hojnacki, su esposo Jared y una enfermera pediátrica cuyo nombre aún no ha sido revelado. Si eres como yo, cuando termines de leer esta historia te vas a sentir reconfortada con la gente. No tienes idea de lo que les pasó.

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Bethany Hojnacki y su esposo Jared pasaron la mañana monitoreando las contracciones de ella y los partes metereológicos. Debe haber sido bien difícil tomar la decisión de cuándo ir al hospital. Ya se temía que la tormenta iba a ser terrible. De hecho, los pronósticos se quedaron cortos. 

En algún momento, a principios de la tarde, las contracciones se apresuraron y el clima empeoró. Abrigaron a su hijo mayor, de dos años, lo mejor que pudieron y lo dejaron en casa de los abuelos. Ya de camino al hospital la nieve caía con fuerza y se dieron cuenta que había una mujer atrapada en un coche atascado. Como pensaban que tenían tiempo decidieron hacer, lo que hacen los ángeles, se detuvieron a ayudarla.

La parada les costó un tiempo precioso. Aún allí con la mujer se dieron cuenta de que sería imposible llegar al hospital. La suerte es que habían ayudado a una enfermera pediátrica, que además había trabajado en el área de maternidad. Ella misma fue quien les sugirió que todos regresaran a la casa de los Hojnacki. Una vez allí, atendió a la asustada mamá en el parto.

Todo salió bien, como cosa de ángeles, pues. Ahora la familia cuenta con una nueva integrante: Lucy Grace Hojnacki, y una amiga de por vida.

Imagen vía Marshal R. Carp/Twitter