Una que otra mujer conoce la pesadilla de tener que esperar más de la cuenta cuando su bebé no se digna a hacer su entrada triunfal. Es una tortura pero de que se puede hacer algo, se puede. Si no pregúntales a las abuelitas y parteras antiguas que inducían los partos naturalmente ¡y sin necesidad de horribles medicamentos!
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Cuando una criatura decide que no es el momento de salir las cosas se ponen color de hormiga para la madre. ¡Qué te lo digo yo que pasé casi dos días muriéndome! Lo cierto es que hay maneras seguras de inducir el parto sin tener que recurrir a químicos peligrosos. Son secretos no tan secretos que han pasado de generación en generación y más de un médico los aprueba. Eso sí, siempre consulta con tu doctor antes de tratar de agilizar el alumbramiento por ti misma. ¡Verás que estos métodos naturales te dejaran asombrada!
Acupuntura: Realizada por un médico profesional (que esté acostumbrado a trabajar con embarazadas), la acupuntura pueden generar contracciones en el útero que aceleren el parto gracias a la presión en ciertas zonas del cuerpo.
Comida picante: Médicos y "abuelitas" concuerdan que la comida picosa –de esas que no te dejan ni respirar—hace milagros cuando de parir se trata. Asegúrate de consumirla una vez pasada la fecha de parto y ten cuidado si sufres de problemas estomacales o irritaciones.
Aceite de ricino: ¡Ay! A pesar de ser un tratamiento efectivo y aprobado por médicos, no se lo recomendaría ni a mi peor enemiga. Fíjate, una taza de jugo de naranja mezclada con cuatro onzas de aceite de ricino estimula los intestinos que rodean el útero causando que el proceso de parto se acelere. Pero combinar la labor de parto con una diarrea horrorosa (señal de que el aceite de ricino hizo su trabajo) como que no es la mejor idea.
Caminar o subir escaleras: Los ejercicios ligeros, a menos que te lo hayan prohibido, ayudan a acelerar el proceso de entrar en labor sobre todo si caminas enérgicamente o subes las escaleras poquito a poco. No te atrevas a hacerlo sola si ya pasaste las 40 semanas, recuerda que nunca se sabe con el cuerpo de una embarazada.
Relaciones sexuales: Conocidísima, pero no podemos evitar mencionarla. Si tu embarazo es de bajo riesgo y aún tienes las energías para cierta acción, la intimidad con tu pareja es uno de los métodos más efectivos y seguros para inducir el parto. Se dice que el semen contiene "ingredientes" que suavizan el cuello del útero y el orgasmo hace que se contraiga. Así todos quedan felices, ¿no?
Imagen vía Corbis Images