Me parece patético que un hombre se exprese tan a la ligera de una ex. Entiendo que por algo se separaron, pero dónde quedan los años buenos y el respeto de un amor que se terminó.
La constante lucha de poder entre Sebasti____án Rulli y su ex Cecilia Galliano se está convirtiendo en un un circo de despechados e inconscientes, que se les ha olvidado que hay un niño de por medio que lleva todas las de perder. ¿Porqué hasta ahora sacar todos sus cochinos trapitos al sol?
Lee más en ¿Qué más?: Alejandra Guzmán defiende a su hija como una fiera y creo que está más loca que nunca
El actor argentino declaró que Galliano jamás tuvo cáncer como lo dio a conocer hace algunas semanas, y lo que en realidad le extirparon, fueron dos miomas que jamás fueron cancerígenos.
Y no solo la desmintió, sino que aprovechó para contarles a todos los medios que durante esa operación aprovechó para hacerse una lipoescultura. ¡Qué finura de hombre!.
A mí ya me está cayendo en la punta del hígado. ¡Yo no le creo nada!. Y mucho menos ahora que la desmiente de tal manera según La Botana.
"No me gusta un tipo de mentiras y son las relacionadas con la salud. Yo la lleve al hospital donde le retiraron unos miomas y estuve allá cuando le dieron de alta. Los miomas eran benignos, lo que sí aprovechó fue para hacerse una operación estética. Es algo muy serio pero no tuvo cáncer". Afirmó el actor.
No quiero ni pensar lo que responderá ahora Cecilia, seguramente Rulli también tiene sus esqueletos muy escondidos y ahora gracias a su indiscreción nos enteraremos hasta de sus fantasías sexuales. ¡Ya verán!
Por lo pronto Rulli no piensa quedarse callado porque sus declaraciones finalizaron de esta manera: "Ella dice que no quiere pleito, pero cuando tiene la oportunidad de que todo acabe, apela. Yo estoy tranquilo porque ya se comprobó que la firma en la factura es de ella".
Si yo hubiera estado frente a él le hubiera preguntado y a todo esto, ¿por qué tú si le pediste que te regresara la camioneta que le habías regalado? Ese dato lo confirmó la actríz.
Yo jamás estaré del lado de los hombres cuenta chiles y mala onda, que no se tocan el corazón para hacer pedazos a una mujer que les dio un hijo y que en algún momento les debió haber inspirado amor. ¡Patético!.
Imagen vía Mezcalent
