A veces no sé si creerle a los supuestos científicos que salen con cada cosa que me dejan totalmente incrédula. Resulta que un nuevo estudio ha descubierto que algo que hacemos la mayoría de las mamás que conozco a la hora de darle de comer a nuestros bebés podría ocasionar que sean obesos más adelante.
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Se trata de alimentarlos con cucharita en vez de dejarlo que ellos solos coman agarrando la comida con sus propios dedos. Según los investigadores de este nuevo estudio, los bebés a quienes se les permite comer solitos y escoger lo que quieren de su plato, aprenden a determinar cuándo están llenos mejor que los bebés a quienes se les da de comer en la boca. El estudio también sugiere que las criaturas más independientes suelen no ser tan quisquillosos a la hora de comer.
Entiendo que es un estudio científico, pero tengo que decir que me parece totalmente absurdo. A toda la gente que conozco le dieron de comer papillas y purés en la boca cuando eran bebés y no todos son obesos. Lo mismo hice yo y mis hijos tampoco son obesos. De hecho, no tienen ningún tipo de problema de sobrepeso.
Estoy harta de que traten de buscar excusas baratas por las cuales la obesidad infantil se ha convertido en una verdadera epidemia. Existen muchas razones validas que explican esta desgracia y, en mi criterio, la principal es que nuestros pobres hijos están comiendo demasiada basura y no están haciendo ni la cuarta parte de las actividades que nos mantenían activos a nosotros cuando éramos niños.
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