Año nuevo, vida nueva… o por lo menos eso es lo que se suele decir al comienzo de un nuevo año cuando todas nos ponemos a hacer planes de cosas que queremos cambiar en nuestras vidas para ser mejores madres. Si eres de las que estás harta de las típicas promesas, te tengo algunas ideas un poco diferentes que te aseguro cambiarán tu vida familiar de manera positiva.
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Gratitud. Una de las cosas más importantes que quiero enseñarles a mis hijos es que se sientan agradecidos por todo lo que tienen. Pero no estoy hablando de cosas materiales solamente. La idea es ayudarlos a estar agradecidos con todo lo que la vida les ha dado. Es por eso que el año pasado implementamos un nuevo hábito en el que mis hijos escribían en un papel las razones por las que daban gracias y lo ponían en un frasco de vidrio. El 31 de diciembre mi hija leyó todos los papelitos y nos acordamos todas las bendiciones del año 2013.
Comer saludable. Llevo semanas obsesionada con este tema, pero en vez de enloquecer tratando de cambiar absolutamente todo acerca de nuestra dieta, he decidido que vamos a cambiar una sola cosa cada mes. En enero, por ejemplo, la idea es no comer comida chatarra ni una sola vez. Eso no quiere decir que no vamos a comer en la calle, sino que no vamos a ir a ningún restaurante de comida rápida. En febrero pienso asegurarme que mis hijos coman más frutas. La idea es no abrumarse con mil cambios de una sola vez.
Deportes. No somos la familia más activa del mundo, pero tampoco no es como que no hacemos nada. El problema más grande es la falta de rutina. Es por eso que este año pienso darles voz y voto a mis hijos pidiéndoles que ellos escojan que quieren que hagamos en cuanto a ejercicios en familia. La idea es que ellos se sientan en control y que sepan que sus ideas tienen valor.
Dinero. De todas las cosas en esta lista, esta es la que más me va a costar. Pero siento que es primordial que aprendan a manejar el dinero desde chiquitos porque estoy segura que les evitara muchísimos dolores de cabeza. Hay muchas maneras de enseñarles a tus hijos el valor del dinero. Yo pienso implementar todas estas ideas.
Voluntarios. Además de enseñarles a estar agradecidos, también es ultra importante para mí que mis hijos aprendan a tener compasión. Por eso es que en las próximas semanas me voy a sentar con ellos y juntos vamos a escoger un proyecto en el que trabajaremos juntos como voluntarios. No creas que porque tus hijos están chicos no pueden participar en este tipo de proyectos.
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