Tengo la suerte de que mis hijos todavía están muy chicos como para tener que h__ablar con ellos de temas difíciles como el sexo, el alcohol, las drogas.__ Pero sé que el día llegará más pronto de lo que me lo imagino y quiero estar preparada porque a mí, la que me habló de estos temas fue mi hermana mayor y no mi madre. Yo pienso hacer las cosas diferentes con mis hijos. A continuación algunos consejos que debes tener en cuenta a la hora de abordar estos temas con tus hijos.
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Infórmate. Antes de sentarte a hablar de temas difíciles con tus hijos asegúrate que estés bien informada para que les des la información adecuada. Las cosas han cambiado mucho desde que tú tenía su edad y lo peor que puedes hacer es hablar sin autoridad.
No esperes hasta que sea demasiado tarde. Lo mejor es hablar de ciertos temas antes de que se conviertan en un problema. Así que adelántate y habla con tus hijos acerca del sexo, por ejemplo, poco a poco dependiendo de su edad.
Aliéntalos a hacer preguntas. No se te vaya ocurrir ignorarlos cuando te hagan una pregunta por más vergonzosa que esta te haga sentir. Tus hijos tienen que sentirse cómodos a la hora de hacerte preguntas y si tú no les prestas atención irán con otros en busca de respuestas.
Se un buen ejemplo. No te olvides que nuestros hijos aprenden de lo que nos ven hacer a nosotros. Si les vas a hablar de lo dañino que puede ser fumar, más vale que no te vean fumando. Lo mismo en cuanto al alcohol. No se trata de que no tomes delante de ellos, pero lo tienes que hacer de manera responsable para darles el ejemplo.
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