![featured-img-of-post-115864](https://mamaslatinas.com/wp-content/uploads/2024/10/featured-img-of-post-115864.jpg)
Ya me están dando ganas de llorar, nada más de pensar que mi hija se irá de la casa para vivir en la universidad a finales de este mes. No va a ser fácil adaptarme a la vida sin ella. Sin embargo, tengo que admitir que no me van a hacer falta algunos de sus comportamientos. Específicamente seis de ellos, aunque sé que son propios de la adolescencia.
1. Sus repentinos cambios de humor: Mi hija puede ser realmente falta de respeto cuando está de mal humor. De hecho, mi madre tiene planes de venir a visitarnos pronto y nada más de pensar en su reacción cuando escuche las cosas que salen de la boca de mi hija me pongo nerviosa.
Lee más en ¿Qué más?: 5 Características que te definen como una verdadera madre latina
Su comportamiento cambia de minuto a minuto. A veces es una chica increíblemente agradable, especialmente cuando quiere algo y de repente puede cambiar y convertirse en un ser muy malcriado (para describir su actitud de una manera decente). En un minuto se va a su cuarto y no habla con nadie y, al siguiente día no para de hablar. Nunca sé qué esperar.
2. La sábelo todo: Mi esposo y yo éramos autoridades y valiosas fuentes de información cuando ella era pequeña. Ahora no sabemos nada y somos totalmente incompetentes en toda materia. Ella lo sabe todo y tiene todas las respuestas. Además, siempre nos recuerda que las cosas "eran muy diferente en ese entonces, cuando ustedes eran chicos", y en mi caso, "en Estados Unidos" es muy diferente a mi patria querida de Chile, me insiste.
3. Ella es el centro de nuestro universo: Creo que Carolina se olvida de que tiene un hermano y que tengo un marido. Será agradable para pasar un tiempo de calidad con mis hombres y que ellos puedan elegir los restaurantes y los lugares donde iremos. Lo mejor para mi hijo será que ahora se podrá beneficiar de mis ganancias para comprar las cosas que a él le gustan (zapatillas de deporte) en lugar de gastar todo en su hermana.
4. Su vida social hiperactiva: Cada vez que sale en la noche o espero despierta hasta que llegue a casa o pongo la alarma para asegurarme de que haya llegado, por si me quedo dormida, me quita el sueño y toda mi energía. Las preocupaciones constantes sobre las fiestas que tiene en casa o el ir a fiestas donde predomina el consumo de alcohol han añadido una dimensión completamente distinta a mis niveles de estrés.
5. Luchar por la música que se escucha en casa y en el auto: No me importa escuchar una variedad de música. Pero para mí la mezcla de techno, reggaetón, hip hop y la música del club que toca en todo momento no es exactamente mi idea de una variada lista de canciones. ¡Y no es precisamente relajante! Espero poder traer de vuelta a Alicia Keys, Alejandro Sanz y ¡los clásicos de Shakira!
6. __ El rol que juegan las redes sociales en nuestra vida:__ Siento como si nuestra familia estuviera arriba de un escenario actuando para las redes sociales que mi hija utiliza constantemente como Instagram, Vine, Facebook, Snap chat, Twitter y otros. ¡Ha habido ocasiones en que momentos familiares íntimos han acabado en el cyberespacio sin mi conocimiento! Y en las otras plataformas, ¿cuántas fotos de mi hija en la misma pose (con cara de pato y viéndose tímida) puede la gente soportar?
Ella es mi mejor amiga. Así que lo irónico es que las mismas cosas que me molestan, serán probablemente lo que más eche de menos con la excepción de cuando se porta falta de respeto. ¡Esa sí que no la echaré de menos!
¿Qué es lo que más detestas de tu adolescente?
Imagen Lucía Ballas-Traynor